Eres el Peregrino Número

Buscador de Temas del Camino de Santiago

miércoles, 25 de mayo de 2016

TRASONA Y SUS BARRIOS: LA "LARGA CIUDAD LINEAL" EN LA CARRETERA DE AVILÉS (CORVERA, ASTURIAS)

Entrando en Corvera por la AS-19 camino de Trasona

El Camino Norte entra en el concejo de Corvera viniendo de Tamón, en Carreño, siguiendo la carretera AS-19, antigua N-632 en este tramo entre Gijón/Xixón y Avilés, en su época la Ribadesella-Canero y, más anteriormente, la Carretera de la Costa, que tras su apertura en 1882 sustituyó al viejo camín real entre ambas poblaciones, por el que iban históricamente los peregrinos, el cual puede decirse que, a partir de Tamón ha desaparecido, no solo bajo el asfalto, sino también con la intensa industrialización de este valle del río Tabaza, que se dirige a desembocar a la ría avilesina


El concejo de Corvera, al que en la denominación oficial tiende a aparece con el añadido de Asturias para diferenciarlo de otras localidades españolas de nombre similar, según acuerdo de 1924, se integró en el antiguo Alfoz de Avilés en 1309, pero contaba ya con dos diputaos propios en la Junta General del Principado en el siglo XV, logrando la independencia concejil un siglo después, si bien siempre se encuadra en los de la conocida como comarca de Avilés, no solo por tradición histórica sino por compartir una especial y particular idiosincrasia hasta el mismo presente


La intensa industrialización desde la Real Compañía Asturiana de Minas hasta Ensidesa, pasando por otras muchas grandes empresas Asturiana de Zinc, Cristalería Española, Dupont, etc.) forma parte de esa idiosincrasia pues transformó estos concejos muy intensamente y a todos los niveles. Económicamente por los muchos empleos que llegaron a crear, poblacionalmente por la gran llegada de gentes a trabajar en ellas masivamente, socialmente por la conciencia laboral creada, urbanísticamente por la aparición de nuevos y grandes barrios y poblados obreros, paisajísticamente por el impacto de la construcción de las factorías y sus citadas nuevas poblaciones, y ambientalmente por el gran problema de la contaminación, sobre todo en esta zona, cruelmente persistente y continuamente denunciado


En el caso concreto que nos ocupa: Corvera, esta industrialización llegó a partir de 1950 con la instalación y crecimiento de la gran empresa Ensidesa, la cual se extendió rápidamente por el valle. Los trabajos de explanación y relleno hicieron desaparecer aldeas, quintanas y muchos lugares, apareciendo otros nuevos para albergar a sus muchos trabajadores y sus familias. Contando además de con viviendas con otros servicios, una historia que repasábamos ya pormenorizadamente en la entrada de blog correspondiente al citado tramo anterior de este Camino, por la parroquia carreñense de Tamón


La subsiguiente reconversión industrial, el proceso de transformaciones, muchas veces convulsas, fusiones y privatización de la antigua Ensidesa que culminaron en la actual ArcelorMittal Asturias, también han marcado, siguen marcando, para lo bueno y paralo malo, el pasado más reciente, la actualidad... y están marcando el futuro de estos concejos con muy especial intensidad


Por estas razones, el trazado del Camino Norte desde la salida del casco urbano gijonés por Veriña hasta llegar a la Ría de Avilés viene a ser de los más "temidos" por muchos peregrinos y no por su dureza orográfica sino por su máxima degradación ambiental y paisajística al estar, como el tránsito por la Ría del Nervión, discurriendo por un área intensamente transformada industrialmente que ya nos acompaña por el paso del barrio de La Calzada a Veriña y Puao, dando luego una muy conveniente tregua por las largas pistas del Monte Areo, con sus eucaliptales, praderías y campos de túmulos y continúa por El Valle de Carreño, preciosamente verde y rural, para ir volviendo paulatinamente al entorno de humeantes factorías en el valle de Tamón


En este tránsito entre lo rural y lo industrial muy posiblemente el trecho más anodino sea este, el asfalto de la carretera AS-19 al lado de las instalaciones de Ensidesa y su ferrocarril industrial, una carretera con bastante tráfico y muy veloz, en la que al menos contamos con buenos arcenes, muy aprovechados también por los ciclistas. Un poco más adelante, en Rovés, dispondremos de aceras y empezaremos a pasar por una serie de barrios urbanos, más o menos restaurados y recuperados, en los que al menos dispondremos de tiendas, bares, zonas verdes y otros servicios


De todas maneras, en la actualidad gran parte del citado tráfico por esta AS-19 es básicamente interno, entre las poblaciones de la carretera, los polígonos industriales y los accesos a la siderúrgica. La antigua Autopista Y, actual Autovía del Cantábrico A-8 descongestionó el paso de vehículos desde su apertura en 1976. La autopista o autovía, La Pista, como la llamaban coloquialmente, discurre justo en paralelo a nuestra izquierda, aunque no la vemos por el alto y tupido matorral que hace de barrera visual pero no tanto de acústica


No es de extrañar que tanto el viejo camín real como la carretera general y la autovía discurran por aquí: este valle es un pasillo natural entre las rías de Aboño y Avilés, abrigos y puertos también naturales desde la remota prehistoria. El topónimo La Barca delata que el río Tabaza o Tamón era navegable por embarcaciones que cruzaban de una a otra orilla hasta que en los primeros del siglo XIX se construyó el primer puente, hoy desaparecido con los rellenos del allanado de Ensidesa. Por esta zona estuvo el bar de Luis de Rovés, desaparecido con Ensidesa, así como el Molín de Vitorio la Barca y Concha


Y sobre La Barca, La Corona, cueto o cerro en El Cardusu, allí donde se unen los concejos de Carreño, Corvera y Gozón, donde se ha localizado un castro astur, muy afectado por las plantaciones de ocalitos,  que a todas luces vigilaría estos ancestrales pasos de la costa central asturiana al sur del Cabu Peñes. En el blog El Rincón de Trasona nos informan de cómo eran estos lugares antes de la industria:
"Antiguamente, Trasona estaba separada de el concejo de Carreño por un regato o alcantarilla situado un poco más atrás de casa de Luis de Rovés, en la casa La Venta, (situada en una posición muy estratégica    dentro del Concejo de Careño), estaba el Feliato, por el que debían pasar todos los transportes de mercancías para pagar un canon a la entrada de los concejos"

Lo cierto es que la carretera, pese a que como hemos advertido ha tenido ciertos cambios en su trazado, vendría a ser el itinerario más aproximado al del antiguo camín real de las peregrinaciones históricas y no existe una alternativa apropiada a no ser dando un grandísimo rodeo: a la derecha una gran área industrial, formada por la extensión que ocupa ArcelorMittal mas algunos polígonos no la hace factible: a la izquierda la autopista, El Monte'l Pando y otras áreas industriales tampoco


Sí se podría hacer una cosa, a simple vista factible, pues espacio entre esta carretera y las vías del tren de ArcelorMittal parece haber: que algún día se prolongase, al menos hasta Tabaza, el Paseo de la Ría, vía peatonal arbolada a la que podremos salir en La Marzaniella, poblado obrero ya al final de Trasona: va paralelo al río pero por la otra orilla, no va lejos de la carretera (sucesora del camino histórico) y aunque al lado de las factorías nos proporciona una encantadora franja natural en la rehabilitada ribera del naciente estuario


Unos tres kilómetros o poco más o menos separan Trasona de Rovés, donde empiezan las poblaciones de la parroquia de Trasona y sus buenas aceras. No es una excesivamente larga distancia pero sí muy monótona, especialmente cuando pega el sol pues no hay sombra y, lo que es peor, cuando las chimeneas echan sus nocivos y tan denunciados malos humos


Verdaderamente la primera población corverana que nos encontramos es Silvota, pero esta queda a nuestra izquierda. Su topónimo está relacionado con selva y es el silvam latino, bosques grandes y frondosos, con mucha vegetación y zarzales, como debieron ser estos parajes en tiempos pasados


En Silvota hay un área industrial con la empresa de transportes bituminosos Feralsa y la Cooperativa Avilesina de Transportes, así como la Estación de Servicio Valcarce: esta es la razón que veamos tantos camiones aparcados


En el blog El Rincón de Trasona dicen que toda esta era una zona muy poblada antes de la construcción de Ensidesa y la autopista:
"... todo unido prácticamente: La Barca  Cotarón, Mocín, Rovés. Las mujeres lavaban la ropa en pequeños remanso del río, mas tarde canalizado también había un molino en la zona, para pasar el río había unos rústicos  puentes realizados con troncos. 
Estaban las casas de Leonídes, Santiago Pravia,  Luis, Ca´Mocín, Ca´Pito, Ca´LLuques, la Casa Xavina, Vitorio, Casa el Cardoso,  Ca´ Pedro,  Casa Mariona, pertenecían a la Parroquia de Trasona, pero no al concejo de Corvera"

Y en lo alto, estratégicamente situado, está el bar y restaurante La Parrondina, un buen lugar de parada que ofrece rico menú


Antaño estuvo en Silvota Casa Mocín, de la familia los de Marcrina. Cuando se construyó Ensidesa se daban muchas comidas a los obreros de Huarte y Entrecanales. Uno de los hermanos, Ovidio Mocín, fue ciclista de renombre y puso un taller de bicis


Detrás de La Parrondina una panera simboliza el pasado rural de estos lugares corveranos


También estuvo el Bar Mojardín, que llevaba Sarina. Fue expropiado para hacer Ensidesa e hicieron uno nuevo que, años más tarde, desapareció también con la autopista. Estas historias de expropiaciones, cambios de ubicación, de domicilio, sucesivas construcciones y reconstrucciones, con traslado incluido, son habituales en la historia de las poblaciones afectadas por estas infraestructuras

Estamos pasando el puente sobre el ferrocarril, viendo a la izquierda las instalaciones la planta química de fertilizantes de la antigua Enfersa, su creación se basó en la misma Ensidesa y otras empresas públicas, dice Wikipedia:

"La empresa fue creada en 1974​ por el Instituto Nacional de Industria (INI),​ a partir de las instalaciones de fabricación de fertilizantes que poseían la Refinería de Petróleos de Escombreras (REPESA), la Empresa Nacional Calvo Sotelo (ENCASO) y la Empresa Nacional Siderúrgica (ENSIDESA).​ El nacimiento de ENFERSA se enmarcó en un contexto alcista de la industria química española, en particular la dedicada a la producción de fertilizantes. Sin embargo, la nueva empresa tuvo dificultades para penetrar en el mercado debido a problemas estructurales: unas instalaciones muy anticuadas, una inadecuada estructura de producción, una mala política comercial, etc.​ Para remediar esta circunstancia, ENFERSA llegaría a acometer inversiones y a poner en marcha nuevas unidades de explotación. Aún así, la anterior etapa de crecimiento y expansión daría un vuelco durante la década de 1980, con una fuerte caída de precios en el mercado internacional.

Debido a la importante crisis que atravesaba el sector de los fertilizantes, el gobierno español de la época emprendió en 1985 un plan de reconversión industrial que también afectaba a la estatal ENFERSA.​ Como parte final de este plan en 1989 el Estado acabó privatizando y vendiendo su activos de ENFERSA,​ que fue adquirida por el recién creado holding Ercros.​ Eventualmente, esta acabaría fusionándose con la empresa Fosfórico Español (FESA), unión de la que surgió una de las mayores empresas privadas españolas de fertilizantes, Fesa-Enfersa, bajo el control de Ercros"

Como en el caso de Ensidesa y coincidiendo con ella, el proceso de reconversión fue, como todas las reconversiones aquí acaecidas, sumamente traumático dadas las grandes imp0licaciones de estas empresas, no solo ya en los empleos, sino en la misma vida y actividad social de estas poblaciones. Aquí recogemos por ejemplo una noticia de 1989 en El País:

"Los trabajadores de la Empresa Nacional de Fertilizantes (Enfersa) en Avilés han convocado para hoy lunes un paro de 24 horas en protesta por la posible fusión entre Enfersa y Ereros, ésta última empresa nacida de la fusión a su vez de Explosivos Rio Tinto y Cros. La convocatoria de huelga fue hecha por los sindicatos UGT y CCOO. Ambas centrales se sumarán a la manifestación prevista para hoy por los trabajadores de Enfersa ante las oficinas centrales del Instituto Nacional de Industria. Los sindicatos UGT y CCOO rechazan el proyecto de fusión porque Enfersa obtuvo el pasado año una cuenta de resultados positiva y el nuevo grupo fusionado ha perdido 3.000 millones de pesetas en lo que va de año. Según los sindicatos, las negociaciones están muy avanzadas, aunque la administración se niega a a facilitar cualquier dato sobre la marcha de las mismas.

La realización de las inversiones previstas en el plan de reconversión del sector de fertilizantes es otro de los puntos reivindicados por los sindicatos, que ya protagonizaron paros en las factorías de la empresa los pasados días 8 y 16. La plantilla de Enfersa en Avilés asciende a 320 personas y su comité de empresa afirma no tener garantías suficientes sobre el futuro de sus puestos de trabajo..."

Es normal, aunque estemos en el concejo de Corvera, que muchas empresas pongan en su nombre Avilés, de Avilés, avilesina, etc., a veces incluso en las direcciones, costumbre que se extiende también a particulares. Este es el caso asimismo de la actual Fertiberia Avilés, empresa de fertilizantes y productos químicos fundada en 1995 sobre otra anterior, Esta es su historia según Wikipedia:

"En 1962 se fundó la sociedad anónima «Fertilizantes de Iberia» (Fertiberia) para la construcción de varias factorías de fertilizantes en La CoruñaHuelva y Castellón.​ En su creación participaron entidades como el Banco de Bilbao, la Gulf Oil Corporation y la International Development & Investment Company.​ La empresa llegó a estar muy ligada al desarrollo del Polo Químico de Huelva en la década de 1960, donde se encontraba una de sus fábricas. El grupo Explosivos Río Tinto (ERT), con gran presencia en el Polo Químico, llegaría a poseer un 50% del capital de Fertiberia.​ Al igual que otras filiales del grupo ERT, en 1989 se integró dentro del holding Ercros. Este procedió a una reorganización de su división de fertilizantes, naciendo así Fesa-Enfersa, que en su momento fue una de las mayores empresas privadas españolas de fertilizantes.​ A pesar de su posición preeminente, en 1992 tanto Fesa-Enfersa como su matriz se declararon en suspensión de pagos,​ debido a la abultada deuda que acumulaba"

Y esta es la historia del grupo Fertiberia desde 1995:

"En 1995 el Grupo Villar Mir se hizo con el control de los activos de Fesa-Enfersa,​ que constituirían la base para la refundación de Fertiberia. A partir de entonces se inició un proceso de consolidación y expansión que llevó a la compra de Sefanitro (1996),​ Química del Estroncio (2006) o Fercampo (2012), así como la creación de nuevas filiales en diversas áreas. Esto llevaría a que Fertiberia se erigiera como la principal empresa española de fertilizantes, contando con presencia en Francia y Portugal. No obstante, dentro del proceso de reorganización interna, en el período 2003-2004 también se procedió al cierre de algunas plantas de producción en CartagenaSevilla y Baracaldo. En 2020 el grupo sueco-alemán Triton Partners se hizo con el control de Fertiberia"

El caminar por este gran eje industrial de Corvera no es, hay que reconocerlo, el paisaje rural y natural que más suelen apreciar la mayor parte de los peregrinos de los caminos jacobitas, y esto podemos verlo en cuantas guías, blogs y foros encontremos. Incluso hay quien recomienda, más o menos veladamente, "saltarse" la etapa o tramo de Gijón/Xixón a Avilés, pero el Camino es así, y si no son sus valores ambientales tiene otros alicientes, como puede ser este, la historia de estos lugares, marcada por el devenir de unas empresas que transformaron todo un valle, y a las que vino a trabajar gente de toda España, y de Portugal, con sus familias. Leemos por ejemplo en Fusión Asturias

"Corvera, concejo asturiano situado en la zona centro-septentrional ha crecido, despacio y seguro, a la sombra de otros concejos mayores. Situado a tan sólo 4 km. de Avilés tiene una población superior a los 17.000 habitantes y una extensión de 45,48km2. Los Campos, Cancienes, Molleda, Solís, Trasona, Las Vegas y Villa son las siete parroquias que conforman su territorio. Algunas como Molleda, Villa y Solís aún conservan un carácter rural acentuado mientras que otros núcleos urbanos como Las Vegas y Los Campos ofrecen todo tipo de servicios y posibilidades.

Desde la autovía A-8, que atraviesa la parte norte del concejo se aprecia la cara más industrial de éste. Empresas como Ensidesa y Enfersa y, más recientemente Dupont, han dejado visibles influencias, y núcleos de población como La Marzaniella que acogen a un gran número de trabajadores.(,,,) No en vano Corvera d'Asturies ha sido el primer concejo asturiano que se ha proclamado a sí mismo Concejo Mestizo para hacer realidad el dicho de que "Nadie es extranjero" en su territorio"

Elemento especial dentro del patrimonio industrial de la empresa Fertiberia, antigua Enfersa, son estas naves, que dada la vinculación del nacimiento de Enfersa con Ensidesa se atribuyen a su mismo arquitecto. Esta es su descripción histórico artística en el Catálogo Urbanístico de Corvera:
"La concepción de la factoría de ENSIDESA como un complejo integral determinó el desarrollo de actividades sidero-químicas, en paralelo a las específicamente siderúrgicas. A ello obedeció el establecimiento de plantas de benzol y alquitrán, de amoniaco y de fertilizantes nitrogenados; en este último caso, un producto de primera necesidad en el sector agrario. En la actualidad, las instalaciones pertenecen a la empresa FERTIBERIA. Los elementos incluidos en este Catálogo Urbanístico son dos naves gemelas de planta rectangular y dilatadas dimensiones: 240 m. de longitud, y 30 y 40,5 m de longitud respectivamente. Presentan estructura de hormigón armado y cubierta constituida por arcos prefabricados del mismo material, donde se abren dos series de ventanales, por cada una de las naves, que recorren toda su extensión longitudinal, proporcionando una iluminación exclusivamente cenital. El conjunto, en el orden constructivo, ha sido resuelto de tal modo que armoniza seguridad y economía, claridad y sencillez, resistencia y regularidad, observándose una perfecta adecuación entre forma y función. Se desconoce la autoría de la construcción, si bien se perciben notables similitudes con destacadas obras del renombrado ingeniero Carlos Fernández Casado situadas en la ría de Avilés como es el caso de las naves de electrólisis de ENDASA, o incluso en la misma ENSIDESA (Talleres de laminación, fundición, calderería, taller mecánico). Estas circunstancias abren una seria posibilidad de atribución de estas naves a Casado"

Recalcamos que un grave problema secular es el de la contaminación del aire, existiendo comúnmente en la calle, más o menos plasmados en los medios de comunicación, entre empleo y salubridad, con muy encendidos debates, pues aparte de verlo a simple vista no pocas veces llega también a olerse. Un simple repaso a los titulares de hemeroteca poniendo en nuestro buscador frases tan simples como "contaminación Trasona" y similares puede darnos una idea de la magnitud del asunto


Se instalan filtros y se plantan árboles, que constituyen también pantallas visuales y acústicas que disminuyen algo el impacto de estas grandes macroempresas con sus enormes instalaciones y emisiones, que por suerte tal vez ahora no se producen a diario pero que, cuando lo hacen, alcanzan temibles picos. Un ejemplo de tantos, esta noticia de la corresponsal Teresa Cembranos el 29-6-2017 en La Nueva España:

"El Colectivo Ecologista alerta de altos niveles de contaminación en la comarca avilesina pese a que está lloviendo. Según los verdes, hay problemas graves con las partículas en suspensión en Corvera y Gozón.

"En alarma está Trasona. El Principado no da datos en continuo pero hoy presentaba una media de las últimas 24 horas de PM10 de 134 microgramos por metro cúbico. Estamos hablando de la estación que está al lado de los vecinos de Roves y que casualmente el Principado quiere cambiar de sitio, para dejar otra mas alejada de los vecinos y que miden mucha menos contaminación", denuncia Fructuoso Pontigo, portavoz del colectivo"


Y eso que, más allá de la franja industrial, el valle presenta su aspecto más rural, tal que aquí, entre Silvota y Rovés, en El Boscón y Tresmonte, topónimos que también hacen referencia a los grandes bosques aquí existentes siglos ha. Muy cerca, al otro lado de esas praderías, está el Pantano de Trasona, puesto en servicio en 1957 para el suministro de grandes cantidades de agua necesarias para Ensidesa, empresa que creó además instalaciones deportivas náuticas y sus correspondientes equipos y clubs, como era normal en las grandes empresas públicas de entonces, las cuales abarcaban muchos apartados de la vida de sus empelados, incluyendo el ocio, entretenimiento y las relaciones sociales

 
Volvemos a echar mano de El Rincón de Trasona para saber qué había antes de estas factorías:
 "En  Rovés estaban el bar de Cotarón, Ca Serín, Casa Fernández, Casa del Campo, Casa de Rovés, Casa de  Fanín, Casa de Xuan de Rosa, la casa de Prudencia, la de Herminio Artime y la de Agustín de Rovés.
Casi todas esas viviendas fueron desapareciendo con la construcción de la carretera, de ENSIDESA,  y sobre todo de Fertiberia y la carretera nueva"

Antaño fueron señores de esta tierra los Rodríguez de León, de la Casa de Trasona, cuyo arruinado palacio tampoco llegamos a ver pero que se alza en las cercanías del embalse, uno de cuyos más influyentes miembros sería Pedro Rodríguez de LeónAlférez Mayor de los concejos de Corvera y Castrillón y Regidor de la villa de Avilés. De él y de su linaje tiene un excelente trabajo Jesús Antonio González Calle, Doctor en Historia, titulado El palacio de los Rodríguez de León en Trasona (Corvera de Asturias), en el que entre otras muchas cosas dice:

."Resulta difícil establecer las verdaderas circunstancias de la llegada de los Rodríguez de León al área de Avilés y Corvera. Este linaje, al igual que otros mucho más poderosos como los Bernaldo de Quirós o los Miranda, dispone de obras genealógicas que pretenden explicar y enaltecer los orígenes de tales familias hasta extremos que entran de lleno en la fábula, la fantasía y la exageración 

(...) nuestra inexperiencia nos llevó a confiar precisamente en las referencias genealógicas que suponían a los Rodríguez de León como descendientes de unos Lorenzana gallegos y leoneses que, tras una serie de contratiempos, huyeron de León para refugiarse en Asturias durante los conflictos civiles que asolaron la Corona de Castilla en el siglo XV

(...) y, lejos de legendarias historias de caballeros y fugas, se fundamentaría en dos tipos de actividades: la Iglesia y administración de bienes eclesiásticos, y el ejercicio del oficio de escribano o notario público. Así, en 1420 hemos documentado a un Lope Alonso de León que es encomendero de los bienes de la Orden de Santiago en Asturias, particularmente en sitios tan distantes entre sí como Sobrescobio y el castillo de Gozón7 ; tal vez la encomienda del castillo de Gozón (en realidad el actualmente conocido como castillo de Gauzón, en el concejo de Castrillón) pusiera por primera vez en contacto al linaje con la comarca avilesina"


Asoma al sur la familiar silueta del Picu Gorfolí, llamado erróneamente así por error topográfico cometido hace décadas, pues es en realidad El Pedregalón (623 m), fácil de identificar por ser el más alto de la Sierra Bufarán, situado entre los concejos de Illas (el más pequeño y rural de los concejos de la comarca de Avilés, además de gran productor casero) y de Llanera, al sur, concejo este donde se halla el verdadero Gorfolí, menos alto y llamado también Forfolíz


Además de su forma y altitud sus antenas hacen que sea muy sencillo de distinguir en esta sierra, también llamada de Faidiello


Sobre el puente, el arcén sigue siendo bastante ancho, pero insistimos que todo cuanto se haga para contrarrestar este tramo desde Tabaza, como ya se ha hacho desde Avilés a La Marzaniella, ha de redundar también muy beneficiosamente en la calidad de vida de los vecinos


Al mismo tiempo, la continuidad del tejido empresarial garantiza los salarios, no pocos ni escasos existentes en ellas, por ello cada vez que se anuncian inversiones es una noticia harto celebrada en todo el concejo y comarca, pues aparte de en la plantilla misma esto resulta beneficioso para los muchos empleos indirectos que estas plantas generan


Pasamos así pues sobre el ferrocarril: uno poco más allá, en La Iría de Rovés, está otra importante empresa, Cimisa (Construcciones industriales, montajes e ingeniería), fundada en 1976 para acometer construcciones industriales complejas


Estos son los edificios del acceso a Fertiberia. La historia concreta de esta factoría corverana la hallamos, perfectamente resumida en Patrimonio industrial de la comarca de Avilés, de Central Reports, del blog Asturias Central de Arturo Suárez:

"La factoría de Fertiberia, S.A. en en la comarca de Avilés Trasona (Corvera de Asturias) empezó a funcionar en 1970, como una sección de ENSIDESA, dedicada a la fabricación de amoniaco y abonos aprovechando para ello varios subproductos de la siderurgia (especialmente nitrógeno de la Fábrica de Oxígeno y gas de Baterías de Cok). 

Entre las instalaciones iniciales se encontraba la Fábrica de Amoniaco, ubicada en la zona de Industria Química en Avilés (anexa a la Fábrica de Oxígeno), que cerró en 1988, y la denominada Fábrica de Abonos, que es la actual factoría.  
En 1974, el Instituto Nacional de Industria decide la escisión de la actividad, creándose la Empresa Nacional de Fertilizantes (ENFERSA), en la que se engloban, además de las instalaciones de Avilés, otras plantas de fertilizantes del INI. Posteriormente, en 1989, se producirá la absorción de ENFERSA por el Grupo Ercros, pasando la compañía a denominarse FESA-ENFERSA, y, finalmente, a su denominación actual de Fertiberia"

De sus características y extensión (dispone de una terminal de amoniaco en Valliniello) aportamos los datos de la misma empresa, en el apartado La frábrica de Avilés:

"La fábrica se encuentra situada en el término de Trasona, ayuntamiento de Corvera, y ocupa una 2 superficie de 179.000 m . Inició su actividad en 1970. Dispone de un terminal de amoniaco, construido en 1980, situado en Valliniello, en las proximidades del puerto de Avilés. La Fábrica de Avilés se dedica a la producción de ácido nítrico, nitratos amónicos-cálcicos (NAC), abonos complejos NPK y abonos solubles (principalmente nitrato magnésico). El ácido nítrico se emplea, principalmente, como producto intermedio en la fabricación del resto de los productos finales"


De frente, en medio del valle siguen las gigantescas instalaciones de ArcelorMittal. Más al norte están los altos de El Cotarón, tras de los cuales se sitúa otro de los embalses construidos para la antigua Ensidesa, el de La Granda


Frente a nosotros ya vemos Rovés, cuyas casas se extienden a lo largo de la carretera, con la siderúrgica a sus espaldas. La primera mención a esta población se refiere al año 921, "Villam Robes cum ecclesia Sancti Vicenti", pero como todos los documentos hallados en el Liber Testamentorum "adolece síntomas de falsedad que obligan a retrasar la validez de sus noticias descriptivas al primer tercio del siglo XII", tal y como se advierte en el Gran Atlas del Principado de Asturias


Muchísima atención ahora en este cruce, sin pasos de cebra ni semáforos: nos cruzamos con la carretera CE-9 que comunica con el Polígono de la Granda y de allí con Candás, por lo que es muy posible haya abundante tráfico y pesado, además del mencionado acceso a Feriberia. Nosotros tenemos que seguir de frente por la AS-19


Y advirtamos nosotros el monolito que indica y confirma la ruta a seguir, insistimos, por la AS-19


Máxima precaución pues aunque son solamente dos carreteras hay cuatro ramales de enlace; uno de entrada desde la AS-19 a la CE-9, otro de entrada directa desde Fertiberia a ella, otro desde ella a Fertiberia y otro de la CE-9 a la AS-19. Es muy peligroso, sobre todo las incorporaciones. No nos olvidemos de mirar atrás a los que desde la AS-10 entran en la CE-9, pues suelen ser los que menos se esperan peatones cruzando. Urge una rápida solución por el bien de todos pues el arcén desaparece y ni hay paso de cebra ni señales luminosas que avisen del muy frecuente paso de peregrinos


Y una muy buena noticia, según esta señal estamos solamente a 5 kilómetros de Avilés, y siempre en llano... o casi. Aquí a la izquierda estuvieron, hasta que fueron expropiadas para la construcción de la planta de Enfersa, la Sastrería de Julio, Casa José Fernández, Casa Piedad, Casa Olegario y Julia (antiguos lecheros), Casa Prudencia y el Bar Cotarón, Casa Argentina de Vitorio y Casa Ángel Tarín. De Prudencia cuentan así en el blog El Rincón de Trasona:
"Prudencia fue un personaje extraño, vestido siempre de negro que gustaba de ir a Avilés a comer y mercar, siempre que podía llevaba  a los niños  Manolita Cotarón  o a  Ton, el hijo de Gabino, ellos le tenían gran cariño  y la recordaron siempre . En la foto de abajo, está con Gabino y su segunda mujer Celia"

Y así como Avilés puede haber sido la propiedad de un tal Avilius, Rovés pudo serlo e un Robelius, según los toponomistas y filólogos, lo que delataría presencia romana o romanizada, o altomedieval. Respecto a Corvera todo apunta a su relación con los cuervos de Peña Corvera, solar de la ermita de la Consolación, al lado del viejo camino procedente de Oviedo/Uviéu y con el que nos cruzaremos cuando lleguemos a la calle Rivero, ya en el centro histórico avilesino


Por su parte Trasona o Tresona sería como decir "tras el río", que pasa a la derecha de las casas, entre estas y ArcelorMittal, por donde también discurre el que fue el Ferrocarril de Carreño, luego integrado en la línea Ferrol-Gijón


Gran parte de las casas de Rovés son viviendas unifamiliares que en su mayor parte, más o menos reformadas, son de origen rural y campesino, para demostrarlo ahí tenemos varios hórreos, pero también hay algún bloque de pisos


Casa Pepe Ca Rosa, que tenía taxi, a nuestra derecha y en la que era la antigua carretera de Candás, que resultó cortada al construirse Ensidesa. Más allá está la Nave de Laminación Sur, de la que escribe Rubén Domínguez Rodríguez en Naves de laminación en caliente, artículo publicado en Patrimonio Industrial.com:
"En el año 1953, cuando la silueta de los grandes edificios de la factoría siderúrgica comenzaba a adivinarse en el horizonte avilesino, dieron comienzo los trabajos de prospección del terreno en la zona limítrofe con Corvera para proceder a la construcción de las naves de Laminación en caliente
Carlos Fernández Casado, el ingeniero encargado de llevar a buen puerto los trabajos, diseñó una de las estructuras más imponentes de todo el conjunto fabril, compuesto por siete naves adosadas, que llegaron a alcanzar los novecientos metros de longitud y que cubrían una superficie de trabajo total de 138.800 metros cuadrados. La colosal estructura fue levantada empleando, salvo en los pilares, elementos prefabricados de hormigón que favorecieron el cumplimiento del plazo previsto para la conclusión de las obras: tres años. En su cimentación se utilizaron una cantidad de campanas y pilotes «que supera […] a la suma de los empleados en todo el resto de la obra». Cada una de las naves cuenta con una luz de entre veinte y treinta metros, y una altura que llegaba a alcanzar los catorce. Una de las principales innovaciones desarrolladas en este edificio séptuple fue la aplicación de las vigas K, de hormigón pretensado, que permitieron salvar las dificultades constructivas propiciadas por las dimensiones del inmueble y la escasez de elementos metálicos. 
A estas instalaciones, levantadas por Huarte y Compañía S.A., llegaban los lingotes recalentados desde la contigua nave de Hornos de Fosa. Una vez alcanzada la temperatura óptima, éstos eran introducidos en los trenes de laminación. El Tren Desbastador, el Tren Estructural, el Tren de chapa gruesa y el Tren Steckel permitían elaborar diferentes perfiles, carriles, bobinas y chapa naval. 
La nave sur, dispuesta de forma paralela al río, cuenta a sus pies con un mural musivario de similar factura a los que encontramos en la nave de Hornos de Fosa. En esta ocasión, su carácter figurativo nos remite a los distintos modelos de perfiles. 
En la actualidad, tras el cese de su uso original, sus diáfanos y versátiles espacios sirven de almacén de productos terminados y preparación de chapa gruesa para la multinacional ArcelorMittal."

Y de esta manera, bien arrimados al arcén, entramos en zona urbana, con sus correspondientes limitaciones de velocidad para los vehículos. Comprobamos que genéricamente en las señaléticas de la carretera, todos estos barrios camineros aparecen reflejados como Trasona, el nombre de la parroquia


Ahora sí que vemos advertencias viarias del paso y dirección en la que van los peregrinos...


Sin embargo, y una vez cruzada la vieja carretera de Candás, comienzan una buena acera por el margen derecho de la carretera, que nos evita estar tan pendientes del tráfico así como que los conductores se encuentren con peregrinos por la calzada


Los hórreos de la derecha son pervivencia de la memoria campesina de Trasona, a la izquierda las naves de Fertiberia el legado y presente industriales. Un buen relato de lo que la Trasona rural y campesina lo encontramos en el blog de Trasonatrasonacovera.com:
"A todos los vecinos se les conocía por "motes": Ca el Pino, ca Tanaxo, ca Xuan, ca el roxo, los del molín, ca María, ca Santa... 
Esta aldea de Trasona vivía en su mayor parte de la ganadería, en casi todas las casas tenían vacas para leche, cerdos gallinas y conejos. También se dedicaban a la agricultura cultivando patatas,cebollas, hortalizas, legumbres que almacenaban en los horreos, en los desvanes de sus casas o en las tenadas y maiz, que colgaban de los horreos despúes de las esfoyazas a las que acudían todos los vecinos y esos días eran de fiesta, y se contaban cuentos o se cantaban canciones. 
Otra reunión importante era cuando había matanza, en la que los vecinos se ayudaban unos a otros a la hora de matar el cerdo y hacer el embutido, se hacían chorizos, morcillas, se salaban los jamones y el tocino y se guardaban cubriéndolos con sal en una duerna o arcón para que aguantasen todo el año. 
Un plato típico de esos días de matanza eran las pelotas o fariñona, se cuecen con el pote de berzas, están exquisitas. 
Ahora es muy difícil encontrar casas en Trasona donde se realicen estas costumbres. 
En algunas casas donde la cosecha era muy abundante, bajaban a la villa de Avilés, caminando o en burro, más tarde en el tranvía, con la mercancía para venderla. Leche, fabes o verdura, que por estar en unas vegas muy buenas eran consideradas de gran calidad y tenían mucha aceptación entre la población de la villa.  
Durante la guerra y posguerra los habitantes de Trasona no pasaron tantas necesidades como los de otras zonas ya que con los productos del campo podían alimentarse..."

Esta era la Casa Alvarón de Rovés, que en origen era una casa mariñana, muy extendida en Asturias, con gran portalón en medio, entrada a la cuadra y la cocina, y cuartos a los lados. Puede verse una foto de ella en http://elrincondetrasona.blogspot.com/2013/10/. En los hórreos se guardaba la cosecha de maíz que más tarde se llevaba a moler al molino que había al lado del Palacio Trasona:
"Al lado del palacio estaba "el molín" donde el pueblo iba a moler el maíz para hacer "las papas", mezcla de harina con leche y cocido hasta formar una masa consistente, cena habitual de los trasoniegos, con la harina de maíz también se hacía la boroña un pan típico asturiano.
El río que pasaba por el molín cruzaba el pueblo desde el sur llegaba por Trevías en los Campos y salía por el norte hacia Avilés, es el río Alvares. Al pasar por Sopeña había unas piedras grandes que las mujeres aprovechaban para lavar y mientras lavaban ponían la ropa al verde extendiendo las sábanas enjabonadas sobre los prados para que al darles el sol quedaran más blancas .Un poco antes en un gran pozo todos los niños de Trasona aprendieron a nadar"

Y así, llegamos a 1950, cuando todo cambió, las vegas fueron ocupadas y rellenadas para la instalación de Ensidesa y en algunos barrios las casas fueron confiscadas:

"En los años cincuenta la vida de la aldea de Trasona se vio transformada con la llegada de la industrialización.
 Las fincas fértiles del pueblo fueron expropiadas y los vecinos de la Marzaniella, Fafilán, S. Pelayo y el Cueto se vieron obligados a dejar sus buenas casas de aldea para hacer la empresa teniendo que construir una nueva en otro lugar. 
Al fondo se ven todas las fincas de la vega del río que desaparecieron. 
Trasona se empezó a llenar de máquinas y gente que venía de toda España para comenzar a construir Ensidesa, al principio vivían en barracones (especie de casas prefabricadas que solo tenían camas), el responsable de estos barracones cocinaba para los obreros, todo esto estaba subvencionado por Ensidesa. Existían las llamadas "camas calientes" habitaciones que alquilaban las familias donde siempre había una persona descansando, porque los obreros trabajaban a tres turnos.  
A los que venían a trabajar de afuera les llamaban "coreanos" porque al llegar con una maleta, les recordaban a los coreanos que escapaban de sus casas en la guerra de Corea y que veían en las noticias que salían en el NODO. 
En cuanto empezaron a ganar dinero los obreros traían a sus familias, al principio, vivían en los hórreos o en habitaciones que alquilaban con derecho a cocina.
Trasona empezó a cambiar, la vega al lado del rio desapareció para dar paso a naves  
Se usaban unas campanas para proporcionar oxígeno a los obreros que trabajaban en la profundidad, muchos murieron en aquella época. 
Se construyó un pantano al paso del río por la zona de Overo, dejó unas cuantas casas del pueblo atrapadas bajo el agua, se trajo el agua desde el rio Narcea para abastecer a la empresa y poder construir el acero. 
Para construir el pantano vinieron obreros navarros, era un grupo grande de la empresa Huarte y con ellos llegó la alegría a Trasona, se juntaban para hacer comidas, siempre estaban contentos, enseñaron a los oriundos de Trasona muchas cosas, entre ellas a diferenciar y comer las setas que había en los prados"

A un lado pues Ensidesa y al otro Fertiberia ocupan la antigua Iría de Rovés. Seguimos leyendo de este blog de Trasona los recuerdos de las gentes que vivieron aquellos años de intensa industrialización:

"Con la industrialización además de puestos de trabajo, dinero y prosperidad a nuestro pueblo llegaron la contaminación, los ruidos y los humos, a nuestras casas caían y caen unas partículas negras brillantes que lo invadían todo, especialmente nuestros pulmones.  
Además de esta contaminación al inicio de la carretera de Candás están los hornos de cal que dejan los tejados de las casas vecinas blancos como si estuviesen regados con harina, con todo esto pusieron otra empresa contaminante en esa zona ENFERSA, una empresa de fertilizantes de la que salían y salen unos humos amarillos, acido nítrico, que produce la lluvia ácida, pero en los años que hicieron todo esto a nadie le importaba nada, hoy estamos pagándolo muy caro, hubo y hay muchas personas enfermas de cáncer. 
Quizá sea el precio que hay que pagar al vivir en una zona industrial"

La carretera realiza en Trasona una larga recta. Aparte existió una antigua vía desechada que fue la del malogrado tramo del Ferrocarril Estratégico del que tanto hemos hablado y volveremos a hablar a lo largo del Camino Norte, dentro de aquella dilatada epopeya ferroviaria que fue el ya citado tren Ferrol-Gijón:

"A Trasona, la atraviesa la carretera nacional que une Avilés con Gijón, antiguamente y desde que yo recuerdo, además tenía una vía paralela a esta carretera como a unos 50 metros al sur de esta. La utilizábamos sobre todo en verano ya que atajábamos y como no pasaban los coches era mucho más segura. En invierno era algo más complicado ya que era todo barro y el acceso se hacía casi imposible. A pesar de esto a los que no nos quedaba más remedio que atravesarla, teníamos que hacerlo. Como no se hacía ningún tipo de mantenimiento siempre había ratas que a los niños nos daban miedo, más que ratas eran “aguarones”.

Esta vía era el resultado de un proyecto para construir un tren que nunca se llevo a cabo, por lo de siempre “malversación de fondos”, la llamaban la vía del estratégico, tenía varios puentes para unir las dos partes del pueblo, estos puentes servían en invierno para que las familias de raza gitana que llegaban a nuestro pueblo les sirviesen para resguardarse de la lluvia y las heladas.

Recuerdo a dos o tres familias que llegaban en sus carros tirados por mulas o caballos, aquellos carros tenían de todo, sobre todo el de una de las familias que más venían era un carro con estanterías donde la mujer colocaba todos sus utensilios perfectamente ordenados. Esta familia estaba formada por el matrimonio y, al principio siete hijos que luego fueron aumentando. Por las noches y para calentarse hacían fogatas, sus hijos, tocaban las palmas, cantaban y bailaban y muchos niños del pueblo queríamos ser gitanos y vivir como ellos"

Ya no cuelgan de los hórreos "riestres de panoyes" o mazorcas sabiamente enristradas de maíz, pero sí esta preciosa buganvilla. En la bodega de este hórreo, normalmente dedicada a guardar aperos, abrió su sastrería Julio El Sastre, que montó aquí su sastrería tras serle expropiada la casa, mientras le hacían otra en el cercano barrio de Gudín


Las coloristas flores dan otro genial toque de vida natural en esta población tan hondamente marcada por la industria...


Este es el Edificio Varela, construido en 1967 y donde vivía mucha gente joven con niños, haciendo de él un lugar muy bullicioso. En el bajo reabrió el célebre Bar Cotarón, de Macrina, que vino con su familia, también tras ser expropiado. En nuestros días, pese a que se hizo un pequeño parque infantil detrás, tiene muchos pisos vacíos



Detrás pasa el tren, construido por la Sociedad de las Minas y Ferrocarril de Carreño, que abrió al tráfico entre Avilés y Candás el 3 de agosto de 1922. En 1974, dos años después que se acabase la interminable obra del Ferrocarril Ferrol Gijón, pasó a ser gestionada por la empresa pública  FEVE hasta 2013, pasando a Renfe Operadora y la cercana estación a Adif. Esta incluido en la red de Cercanías de Asturias



Enfrente del Edificio Varela, Casa Argentina la Barca. La acera es suficientemente ancha y una línea de farolas la ilumina en horas nocturnas, como en cualquier trayecto urbano, pero los vecinos denuncian el "abandono y degradación del barrio", poniendo a este edificio como referencia, tal y como como comprobamos en esta noticia de Borja Pino para El Comercio del 27 de septiembre de 2021:
"El espacio vacío comprendido entre los dos postes del tendido de fibra óptica que flanquean el vasto Edificio Varela, separados entre sí por apenas trescientos metros, delimita el punto exacto en el que el progreso dejó de avanzar en el barrio de Rovés, en Trasona. Ensombrecido por las mastodónticas siluetas de Arcelor y Fertiberia, el lugar, uno de los más orientales del concejo y próximo a la frontera con Carreño, acumula desde hace años protestas vecinales por su progresiva degradación. Pero, para los resistentes que aún habitan allí, nadie escucha sus palabras.  
La historia del Varela, como la de la calle que le da nombre, es extensa, y se remonta al año 1968, cuando finalizó su construcción para dar cobijo a las hornadas de trabajadores que acudían en masa a Ensidesa. Con sus cinco portales, cada uno de diez viviendas, su privilegiada posición a orillas de la AS-19 pronto lo convirtió en un foco de atracción. Un relato análogo al de tantas otras zonas de la comarca, pero con un presente bien distinto. 
«Estamos al lado de los postes, pero aquí no llega la fibra, solo tenemos internet por satélite, y es muy malo», relata Juan Alonso González, que ya acumula 46 años viviendo en el complejo. Aquí y allá, al pie del bloque, están los tubos de las conexiones de red... Vacíos. «Lo montaron, pero no tendieron cable. Hay vecinos que han hecho apaños, pero ni así, tengo contratados veintidós megas y me llegan tres». 
A la vista de tal hecho, no es difícil imaginar lo complejo de atraer a personas que revitalicen el barrio. «Han venido familias jóvenes, con hijos, pero se acaban marchando por no tener internet, porque así no se puede trabajar, ni estudiar», interviene Ángel Alonso. El resultado es patente: de las cincuenta viviendas del barrio, «más o menos la mitad están vacías. ¿Quién va a venir así?», se preguntan los vecinos ante la carencia de servicios básicos hoy en día. 
Pero la mala conectividad no es la única losa que pesa sobre Rovés. Aquí y allá, la maleza crece sin control, en terrenos que, en muchos casos, son propiedad del Principado. Incluso en el cercano parque infantil, de aspecto desgastado y normalmente en desuso, árboles y arbustos crecen sin medida, al menos, a juicio de los residentes del Edificio Varela, hartos de que «no tengamos ni un rayo de sol, hay humedad en las casas». «Un día hasta el Ayuntamiento nos echó la bronca por retirar un arbusto caído», dicen (...)  
Con la AS-19 cerca, al igual que las vías férreas de Feve y de Arcelor, los ruidos son una constante..."

La carretera se dirige de Rovés a Gudín, otro de los barrios de la parroquia, que vemos al fondo.Toda esta zona de La Iría o Ería Rovés cercana a la carretera estaba también muy poblada antaño:
"En la ería, entre Roves y Gudín había unas cuantas viviendas, de planta baja y piso, en esa época no tenían agua en casa, un pozo con bomba servía para cubrir sus necesidades, además de un pequeño lavadero. 
 En ellas vivieron Floréz y María Antonia, Mari Carmen la peluquera y sus padres, Paulino, los hermanos Caneiro, Azucena y su marido Braulio, Aquilino, el camionero y Alicia, Ramón y su mujer, con su hijo Mino, que ahora canta en la orquesta Panorama. En los últimos años construyó una casa Esperanza el Bordal al lado de la casa de Florez. En estas casas vivían propietarios e inquilinos que habían venido a Trasona para trabajar en  la siderurgia. 
Cerca de esta zona se  construyó la  granja de Álvaro, expropiado por  ENSIDESA,  Manolita recuerda que cerca de las casas  había un barracón donde daban comidas a los trabajadores y un pequeño bar, desaparecieron cuando se construyó ENFERSA, también las se habilitaron unas pequeñas chabolas para alojar a las familias recién llegadas a Trasona para trabajar en las empresas que construían ENSIDESA. 
Con las expropiaciones de ENFERSA, desaparecieron todas las viviendas situadas al lado derecho de la carretera, en el espacio que quedó ya  cerca de Silvota, se construyeron  casas que todavía perduran son la casa de Carmela"

Al menos la acera, para los viandantes y los peregrinos, es una verdadera bendición tras el largo recorrido por arcén desde Trasona

Pasamos ahora frente Casa Herminio, también delante del Edificio Varela


Una hermosa higuera o figar saca sus hojas y ramas hacia la calle. Alrededor de las casas, además de huertas, era común plantar frutales


El gran escritor y conocedor de las rutas xacobeas, Antón Pombo, escribe lo siguiente en su Guía del Camino de Santiago. Camino Norte:
"... Con un nivel de degradación ambiental semejante al que conocimos en el valle del Nervión, la entrada en Avilés por la AS-19 constituye uno de los tramos más horrorosos del Camino Norte..."

"... los barrios industriales a partir de Tamón, sucediéndose los grandes complejos fabriles de ArcelorMittal y Fertiberia por Tabaza y Trasona" 

El acondicionamiento de esta acera, que estaba en muy mal estado, puede ser una medida paliativa, pero mucho más lo sería, insistimos, la muy deseada prolongación del Paseo de la Ría hasta Tabaza, o abrir alguna otra senda paralela cercana a la carretera que enlace con él


Desde aquí, mirando hacia la derecha y hacia atrás, más allá de la tapia, tenemos otra muy buena vista del Edificio Varela. Antaño había atrás, en el río, un remanso, La Pinga, donde lavaban las mujeres y se llevaba a beber el ganado. Una antigua casa, la del Campo, fue vivienda de María Silvota y Manolo cuando se casaron, pasando después a Pelayo y Elvira


Casa de Agustín Rovés, donde hubo tienda, bar y baile, negocio fundado por sus padres. Agustín  fue entrevistado por Sheyla González para El Comercio dado que vivió en primera persona y en esta su casa de nacimiento aquellas radicales transformaciones aquí acontecidas desde la década de 1950. Esta entrevista fue publicada el 10 de abril de 2016 con el título Historia viva de Trasona:

«Antes todo esto eran campos de labranza y pastizal». Así recuerda Agustín García a su añorada Trasona, esa pequeña zona rural corverana en la que nació en 1923 y que ahora le reconoce como su vecino más longevo. Su cuna, el número 1 de Rovés. Desde esa casa ha visto aumentar su familia, casado con Casilda Baladrón, y al barrio. Su pequeña casa ahora está flanqueada por Fertiberia y ArcelorMittal. «Ahora es todo industria y el barrio ya no es lo que era. Antes había mucha más vida, las grandes empresas cambiaron a Trasona completamente, del día a la noche», comenta sentado en su salón.

Hijo de un indiano, que tras pasar 22 años en Estados Unidos volvía a su casa para forjar su familia, Agustín García recuerda como su casa era a la vez una pequeña tienda de alimentación. «Todo se cerró cuando llegó el gran centro comercial. Para muchos supuso un avance, para los de siempre la perdición», se resigna. Desde Rovés vio pasar los años más duros de la historia de España y de su propia familia. «Mataron a mi padre y quedé al cuidado de la familia materna. Recuerdo como había toque de queda obligado. No es que los jóvenes volviéramos pronto a casa, es que nos hacían volver», explica 
Su niñez y adolescencia las pasó en el Colegio del Sagrado Corazón de Jesús, conocido como Escuelas de la Marquesa de Peñalver. «Nos daba clase el cura e íbamos a misa todos los días del curso en honor al Conde de Peñalver, entonces difunto. Éramos solo niños porque las niñas iban a otro centro cerca del cementerio actual», recuerda aunque con un pequeño sin sabor, «ahora eso también ha desaparecido y está cayéndose, aunque en su momento se quiso convertir en un instituto para jóvenes pero no se logró sacar adelante». 
Su familia aumentó en 1957, cuando se casó con Casilda Baladrón, con quien tuvo una hija. Nunca abandonó su casa natal. «No tuve la necesidad de irme. Cuando llegaron las grandes empresas me ofrecieron irme a San Sebastián, pero a mí no se me había perdido nada allí, lo tenía todo aquí», afirma Agustín García. Su faceta laboral ha sido variada. Trabajó durante 22 años en Entrecanales con la pala excavadora cuando se levantó la actual ArcelorMittal. Después se pasó a Endasa y al mundo de la construcción. 
Partícipe de la creación de las grandes empresas instaladas en la comarca recuerda que no fue una implantación sorprendente. «Como vinieron poco a poco nos fuimos acostumbrando. Llegamos a tener una caldera de vapor detrás de casa. En realidad lo arrasaron todo, pero nos acostumbramos a ello», comenta. 
Esas empresas que transformaron el barrio corverano también «trajeron consigo un boom de gente. Llegaban trabajadores y familias que poco a poco se asentaron, sobre todo en las casas construidas por la antigua Ensidesa en la zona de La Marzaniella y El Pobladín», explica Agustín García, que remarca como Trasona contaba también con una vida social amplia y el actual centro cultural acogía cada semana bailes, con orquestas de renombre. «Llegaban autocares para asistir a las fiestas y bailes», recuerda. 
A la vez que se expandían las empresas, se contraía la extensión de Trasona. «Esto antes llegaba hasta Los Campos, pero poco a poco se le fue comiendo terreno y se creó aquella parroquia. Luego llegó la autopista a partirlo todo a la mitad», narra Agustín García, que también hace hincapié en la creación del pantano, «primero se canalizó el río Cancienes, pero como no era suficiente se hizo un canal del río Narcea, así consiguieron llenar el embalse». 
Las pasada edición de las fiestas de Trasona, dedicadas a los indianos, le rindió un pequeño homenaje nombrándolo 'Abuelo de Trasona'. «Fue un orgullo, aunque no he tenido una vida muy ajetreada ni destacada. Ha sido muy tranquila y desde la misma casa», insiste"

Con la jubilación, Agustín Rovés se dedicó a su gran pasión, el fútbol, ayudando como tesorero, encargado de mantenimiento, vendedor de boletos y todo aquello cuanto pudiese para ayudar al equipo local, el Club Deportivo Trasona, tristemente desaparecido en 2011 tras 33 años de existencia. Jugaba en el campo de fútbol de El Palacio, cuyos dueños lo son también del terreno de juego


Antiguamente se dice había enfrente, al otro lado de la carretera, un bar, El Ventoso


Otra vista de las grandes naves de laminación, la antigua Acería LD-II. Cuando llegó Ensidesa era tal la cantidad de gente que vino a vivir a estos pueblos que hasta se acondicionaron hórreos, paneras y cuadras para vivir familias enteras
"Andalucía, Extremadura, Castilla..., prácticamente de toda España, se empezó a entender otros acentos y otras comidas, también vinieron muchos jóvenes procedentes de Rusia, eran los niños de la guerra que retornaban a España con ganas de trabajar y con otro idioma además del suyo, algunos venían casados con rusas, tenemos muy buen recuerdo de estas familias, sobre todo a los niños de entonces nos impresionaba esto mucho y los conocíamos más que por su nombre por el mote "El Ruso". 
Muchos vecinos de Trasona empezaron a trabajar en la "Empresa", seguían con las vacas y trabajando los terrenos, pero tenían el sueldo asegurado y las vacaciones eran para ir a la hierba" 
Leer más: https://www.trasonacorvera.com.es/historia/

Estamos por aquí llegando al barrio de Gudín, que también extiende buena parte de su caserío por la carretera. Su etimología parece proceder de un antiguo posesor, Gutinus. Pero filología ancestral aparte es sabido que los Rodríguez León, ya mencionados, fueron los antiguos dueños de Trasona, siendo los campesinos sus arrendatarios, pagándoles estos normalmente en dinero o con especies, mandando a Madrid patatas, fabes, cebollas y demás productos del campo 


Pasó luego la parroquia por diferentes familias hasta que pasó a los condes de Peñalver, uno de los cuales, Nicolás de Peñalver y Zamora, fue entre otras cosas diputado y Alcalde de Madrid, pasando en Trasona sus veraneos, llegando a ser visitado por la Infanta Isabel de Borbón, La Chata


El conde falleció el 7 de febrero de 1916, siendo enterrado en el cementerio de Trasona en un solemne un entierro al que acudieron la aristocracia y burguesía asturiana de la época. En 1921 su viuda funda aquí el Colegio Sagrado Corazón en memoria de su marido, para que los niños campesinos tuviesen una buena educación


En Gudín van cerrándose los espacios delanteros a las casas, antes pequeñas explanadas abiertas donde aparcaban los coches y se paraban los viajantes y repartidores, siendo además verdaderos espacios de socialización. Lugar de paso del camín real y luego de la carretera, siempre hubo tiendas y comercios. Cuando llegó Ensidesa, seguida de otras industrias, si bien el cambio físico y social fue impactante esto hizo de Trasona una auténtica villa lineal a lo largo de la carretera de la costa, con numerosos bares y negocios, como aquí en Gudín, el bar Varela, que además de chigre tenía bolera. A su lado estaba la tienda de Casa Leonides


Asimismo estuvo en Gudín el bar de Marcelino Pajares (que era también carpintero) y su mujer María, que era la que normalmente atendía en el chigre, pues su marido trabajaba casi todo el tiempo en la carpintería


En Una Trasona tras otra, Marcos Palicio publicaba en La Nueva España, allá pasado el año 2010, un resumen de la realidad de Trasona en aquel tiempo, pasadas la las tremendas reconversiones industriales, en buena parte extrapolable a la actualidad:
"Trasona, como Llaranes y otros barrios próximos del distrito metropolitano avilesino que refuerza Corvera, está unida en vida e historia a la gran factoría siderúrgica. También a otras empresas industriales, como la fábrica de fertilizantes, de forma que ha ido alargando sus áreas de viviendas en paralelo a las instalaciones de Arcelor y Enfersa, de Oeste a Este, hasta alcanzar Tabaza y la moderna y compacta acería LD-III, instalada en territorio del vecino concejo de Carreño y a través del que avanza la conexión definitiva con el área siderúrgica de Gijón, Zalia mediante.

Surgida en una época de transporte difícil, de escasas y deficientes infraestructuras públicas y que apenas conocía la difusión del automóvil privado para las clases trabajadoras, la cercanía entre el centro de trabajo y la residencia era una exigencia sistémica, como lo era la acuciante necesidad de vivienda para los miles de nuevos trabajadores. Ambas razones determinaron esa proximidad, tal uso promiscuo del espacio, tan alejado de lo que hoy aceptamos como adecuado en el área metropolitana. Las poblaciones sufrieron el aire sucio y pesado, los ruidos y el paisaje industrial, atraídas por los mejores salarios y la vida urbana. Era la modernidad.

Así se fueron extendiendo los barrios de Trasona, como continuación de la barriada de Llaranes, construida en términos de Avilés y residencia de los nuevos trabajadores de Ensidesa"

Más allá de Gudín divisamos los edificios de El Pedrero, barrio plenamente urbano al que fueron a vivir, en pisos, muchas familias expropiadas por la industria, además por supuesto de trabajadores de estas fábricas


Trasona se conforma a lo largo de esta carretera como ciudad lineal, pero su expansión se ve limitada, encajada entre las factorías y la autopista, y de esta manera lo plasma asimismo Marcos Palicio:
"Trasona, parroquia sin un gran núcleo de población de referencia, con poco más de 2.000 habitantes en el último censo de 2010, se obliga a confiar en el paisaje verde y abierto que no se ve desde la travesía industriosa de la AS-19. Aquí su apariencia urbana se aloja en un pasillo recto trazado en paralelo a la carretera y atrapado entre las murallas fabricadas por la industria y el progreso: por un lado, la planta química de Fertiberia y la autopista «Y»; por el otro, las naves interminables de la acería"

Consultamos ahora a otros especialistas, Fermín Rodríguez y Rafael Menéndez, cuando también en la serie Viejas y nuevas polas de La Nueva España, dice en su artículo Al calor de la industria:
"... aquí es la Avilés-Gijón la que cumple ese cometido de vía de apoyo para la nueva ciudad lineal, construida apresuradamente y en la que se entremezclan criterios higienistas en una atmósfera de industria pesada, que hace convivir urbanizaciones y áreas industriales y empresariales durante varios kilómetros, en los concejos de Avilés, Corvera y Carreño, y cuya integración-saturación está creando un espacio retroportuario en la tendencia del que se está haciendo presente en los grandes puertos del mundo al soldar las áreas industriales-portuarias de Avilés y Gijón. Grandes infraestructuras de la civilización industriosa globalizada al servicio de las cuales algunos países emergentes ponen todo el territorio y otros, más viejos y más expertos, intentan complementarlas con la pretensión de excelencia territorial, hipótesis obligada para no desatender las obligaciones con las poblaciones locales, que quedan dentro de la retícula trazada en su localidad por las grandes infraestructuras y que en aquellas localidades que desde la vieja industria intentan seguir siendo punteras en el nuevo contexto de competencia global aún requiere de una ordenación del territorio más afinada, como es el caso metropolitano de Asturias que ahora nos ocupa"

Por ello, fuera de lo que es el espacio de esta franja de la carretera, Trasona tiende a saltar al sur, hacia el pantano y el cercano barrio corverán de Los Campos, donde se han hecho nuevas urbanizaciones, no exentas de polémica, así como un centro comercial. De ello hablaremos enseguida


En este apartado del crecimiento de estos barrios es interesantísimo también lo que nos aportan en corveratrasona.com dentro del apartado Historia de Trasona:
"Se hicieron tiendas: El Villanueva, Casa Elena, Casa Alicia, el Belarmino, casa Fructuoso la Chapa, casa Morán, casa Cotarón Casa... 
Carnicerías la de Conchita y Angel, y la de Celestina y Paco, el pescado se traía cada dos días al pueblo lo traían Pilar y Tomás en un "isocarro" primero y luego en una furgoneta. 
 Teníamos dos zapateros en el pueblo, porque en esa época los zapatos tenían que durar mucho y ya se llevaban los tacones en Trasona, hasta los años cincuenta lo habitual era usar madreñas o alpargatas.  
Había un cartero aunque casi siempre venía la mujer repartiendo las cartas y desde la carretera tocaba un silbato para que bajaran a por ellas desde las casas alejadas. 
Modistas y sastre, un "practicante" con titulo, era Ureña, los niños le teníamos pánico y además estaban unos cuantos aficionados que también eran el terror de los pequeños y algún que otro grandullón.  
A partir de los años setenta los niños nacían en el Hospital o en la Cruz Roja de Avilés, pero antes todo el mundo paría en casa si no había complicaciones. 
Se construyó un Hospital en Llaranes para los empleados de la Empresa donde se les atendía médicamente. Un " practicante" del hospital de LLaranes era Cortina que siempre estaba dispuesto para hacer lo que se necesitara por sus vecinos de Trasona. 
Las viviendas en Trasona aumentaban de día en día, surgieron barrios nuevos como Favila, Varela, el Valdés, normalmente cogían el nombre de la persona que lo empezaba o promovía. 
En los años cincuenta y sesenta había dos "contratistas de obras" que hacían casi todas las viviendas que se construían en ese tiempo eran: Belisario el del Roxo y Rubín de ca´ la Pepa"

Otro ejemplo de la transformación de Trasona: este sería un ejemplo de la arquitectura rural predominante de le época preindustrial: una buena casa mariñana con portalón de acceso, cuadra y cocina al fondo y cuartos o habitaciones a los lados, además de sala y más cuartos en el piso alto, con un largo corredor. Lamentablemente en ruinas, figura de esta manera en el Catálogo Urbanístico de Corvera:
"La solución del portal, tan extendida en la arquitectura popular asturiana, da como resultado en la zona central de la región un tipo de edificación muy difundido denominado casa mariñana. En Corvera la mariñana se puede considerar como el tipo de vivienda más representativo. Esta casa responde a un tercer tipo o tipo evolucionado en el desarrollo formal de la casa mariñana. Tiene planta rectangular compuesta por planta baja y piso con cubierta a dos aguas con caballete paralelo a la fachada principal. La planta baja se estructura con dos módulos laterales (que ahora solo aparecen en esta planta baja) que flanquéan un espacio abierto central, el portal, que sirve de distribuidor al que se abren las puertas de las dependencias laterales (antiguamente destinadas a dormitorios y despensa) y dos de acceso a la vivienda. En el piso superior se abre un corredor o solana de madera que ahora recorre toda la fachada y se destaca ligeramente sobre los cuartos inferiores apoyándose sobre dos machones que sobresalen de éstos. Los cuartos laterales cuentan con una ventana y la puerta que comunica con el portalón, mientras que en la planta superior, el corredor cuenta con una puerta central y un pequeño vano a cada lado. Esta evolución de la casa mariñana permitió una diferenciación más clara entre los espacios destinados a vivienda y los espacios de trabajo"

Viene ahora un poco de suave descenso por Gudín en dirección al enlace con la autopista y otra empresa que marcó una de las últimas transformaciones importantes de Tabaza, Parque Astur, en Trasmonte y, junto con ella, las urbanizaciones y el campo de golf que se hicieron en el barrio de Truyés, sobre el embalse, así como el Hotel los Balagares, este ya en lo alto del monte sobre el barrio de Llaranes, en Avilés, también de los construidos con la autopista


Aquí, en esta antigua panera, estaba el bar La Bodega, que abrió precisamente en la bodega o antiguo almacén de enseres agrarios debajo de la panera en aquellos tiempos en los que tanta gente se asentó en Trasona para trabajar


La panera era de la casería de Ca Ángel, que esta sí, conserva preciosamente restaurada, su magnífica estructura de portalones y corredores. Esta es su descripción histórico artística en el citado Catálogo Urbanístico de Corvera:
"Estas dos casas responden a un tercer tipo o tipo evolucionado en el desarrollo formal de la casa mariñana. Tienen planta rectangular compuesta por planta baja y piso con cubierta a dos aguas con caballete paralelo a la fachada principal. La planta baja se estructura con dos módulos laterales (que ahora solo aparecen en esta planta baja) que flanquéan un espacio abierto central, el portal, que sirve de distribuidor al que, en origen se abrían las puertas de las dependencias laterales (antiguamente destinadas a dormitorios y despensa) y dos de acceso a la vivienda. En la actualidad solo mantienen una puerta principal de acceso al interior. En el piso superior se abre un corredor o solana de madera que recorre toda la fachada y se destaca ligeramente sobre los cuartos inferiores apoyándose sobre dos machones que sobresalen de éstos. Los cuartos laterales cuentan con una ventana, mientras que en la planta superior, al corredor se abren cuatro puertas. Esta evolución de la casa mariñana permitió una diferenciación más clara entre los espacios destinados a vivienda y los espacios de trabajo. Las dos viviendas han sido recientemente adecuadas para su uso residencial. Se han cambiado las cubiertas, restaurado los corredores de madera y se ha cambiado parte de la marquería. Los portales de acceso se han reformado dando lugar a un aspecto netamente doméstico, que difiere sustancialmente del aspecto tradicional que debió tener en origen"

La panera, que de usos meramente labriegos pasó a los hosteleros, es también todo un ejemplo de los cambios vividos en Trasona en solo unas décadas, si bien, como veremos, estos parecen repetirse cíclicamente


Panera y bodega; toda la familia de Ca Clara atendía en este chigre-panera que mantiene su estructura exterior, si bien se recuerda especialmente a Ángel


Siempre en recto, atravesamos el barrio de parte a parte y cruzamos el camino que comunica con Laminación Gudín, siguiendo recto por la acera


En Gudín estuvo el bar-tienda La Viña, trasladado de su ubicación original por las expropiaciones de Ensidesa a un nuevo edificio construido por sus propietarios América y Agustín


Seguidamente y con un gran patio de recreos enfrente, está la escuela de Gudín, dedicada en nuestros días a Educación Infantil, pero que en origen fue escuela de niñas, trasladada aquí de El Cuetu, cerca de la iglesia En  Aquellos maestros de Trasona se nos informa de las maestras que aquí dieron clase:
"En Gudín también dio clase Dña. Delfina, que después paso a Favila cuando se hizo la escuela a mediados de los 60. Después  de estas maestras pasaron muchas por las escuelas de Trasona, una de ellas Dña. Mª del Mar Rodríguez que estuvo desde 1981 hasta 1983, luego pasó al colegio de Los Campos. 
A mediados de los 70 los alumnos se trasladaron a los Campos donde se unificaron todas las escuelas en un solo centro y solamente quedaron en las escuelas de Trasona los niños y niñas pequeños. La maestra que permaneció más tiempo en Trasona en los últimos tiempos fue Dña. Milagros, (...) todos los niños de nuestro pueblo desde los años ochenta pasaron por sus manos"

Sin embargo, hay un inconveniente, la subestación eléctrica, de la que el vecindario reclama su oportuno traslado, lo cual también es cada poco noticia, tal que aquí, también en El Comercio, de fecha 7-12-2018:
"Hidrocantábrico Distribución Eléctrica invertirá 1,7 millones en modernizar la obsoleta y polémica subestación eléctrica de Trasona, una instalación adosada a una escuela infantil y próxima a un conjunto de viviendas que alimenta a las factorías de Arcelor y Fertiberia. Los vecinos del entorno y los colectivos ecologistas llevan años reclamando su traslado para evitar el riesgo que, a su juicio, supone tanto por los posibles efectos nocivos para la salud que genera en forma de contaminación electromagnética como por las consecuencias que podría tener una hipotética avería incendio. Finalmente la decisión ha sido modernizarla, no trasladarla.

Según recoge la disposición publicada ayer en el Boletín Oficial del Principado de Asturias, el proyecto persigue «la modernización de los sistemas de control, protección y alimentación auxiliar así como el reemplazo y la actualización tecnológica de la aparamenta», nombre que define al conjunto de aparatos de maniobra, regulación, control, y medida, incluidos los accesorios de las canalizaciones eléctricas, de la instalación, así como «mejorar la calidad del servicio eléctrico y la operación en un punto importante de la red de distribución eléctrica en Asturias»

Y en Una Trasona tras otra Marcos Palicio glosa así este lugar: 

"Gudín, casi el barrio más oriental de la parroquia de Trasona, tiene una escuela empotrada en una subestación eléctrica. Hay un patio con columpios y toboganes, y un grupo de niños juega con toda naturalidad delante del espeso bosque de torres de alta tensión. El edificio se ha hecho un sitio al borde de la carretera AS-19, la antigua de Avilés a Gijón, a su paso por Corvera..."

Las altas torres de alta tensión forman un verdadero bosque metálico en este cruce de Gudín. Enfrente siguen las instalaciones de Feriberia. Más allá están la autopista y la zona de expansión de Trasona hacia el pantano, la zona más rural pero también paulatinamente urbanizada


Sobre los árboles que sirven de pantalla visual, más que acústica, de la autopista, tal vez veamos asomar parte de las instalaciones del gran centro comercial de Parque Astur, inaugurado el 1 de junio de 2001. Seguimos el relato de Marcos Palicio cuando dice:
"La antigua Ensidesa era la cabeza tractora, incluso la constructora de una parte abundante del caserío que hoy le sigue acompañando en Trasona, pero la parroquia corverana, la tercera del concejo en habitantes, tras Las Vegas y Los Campos, sabe que ya no puede ser sólo acería, laminación fría y caliente, que aquí debe haber algo más que parque de chatarra y fabricación de fertilizantes. Además de todo eso y de lo que germinó a su alrededor, (...) se reconoce hoy en los otros paisajes distintos del otro lado de la «Y». La autopista se atraviesa por debajo, pasando un «túnel del tiempo» que va a dar a Fafilán y descubre que la vista se libera de pronto de los corsés de la industria, que emerge el verde que rodea al embalse de Trasona, asoman los neones del centro comercial Parque Astur, el campo de golf de Los Balagares, un palacio del siglo XV casi a pie de agua y, sin salir de la parroquia, todos los hoteles del concejo de Corvera, tres   
(...) ., el Zen Balagares, 147 habitaciones con spa y campo de golf, y a su lado una urbanización de estilo inglés que hace irreconocible la vieja casería de Truyés. «Esto empezó siendo rural, una aldea», resume. «Luego se metió la industria y mañana intentaremos que sea turística». Turística y residencial, le dirían los al menos dos centenares de nuevos habitantes que tiene la nueva colonia de chalés de Truyés. Para preparar los dos futuros, aquí dicen que el truco es saber subirse a la corriente que viene de Avilés, ese lugar que «nadie imaginaba hace diez años como destino turístico» y por el que ahora preguntan con mucha frecuencia en la recepción de los hoteles. La energía del centro cultural Oscar Niemeyer explica sólo en parte que Trasona no tuviese ningún hotel hace algo más de tres años y ahora cuente con todos los de Corvera, más de 600 camas sumando las de un pequeño establecimiento de dos estrellas con las que tienen dos grandes de cuatro. Las posibilidades de este paisaje han puesto también algo de su lado, pero el secreto es la voluntad de empaquetar todo lo comercializable y vender comarca, utilizar el magnetismo conjunto para el beneficio extensivo  y aprovechar esa «ocasión única», irrepetible, «que no se puede perder» y avanza la oportunidad de asentar Avilés y su comarca"

Menos entusiasta vemos al blog de Corvera, donde en el apartado Historia de Trasona podemos leer:
"En nuestro pueblo los cambios parecen cíclicos cada 20 años se realiza un nuevo proyecto que cambia la vida de los vecinos, fue en los años 50, en los 70 y en los 90 se volvió a repetir para construir un gran centro comercial, Parque Astur.

Los terrenos eran de especial protección por estar en el entorno del pantano, los propietarios nunca pudieron construir, pero llegaron los promotores madrileños y consiguieron los terrenos por expropiación forzosa, alegando bien social. 

Tras muchos disgustos de los dueños de las fincas y tener que contratar abogados para que los asesoraran, el propio Ayuntamiento contrató "al abogado más caro de Asturias" según palabras del concejal de urbanismo, para recurrir el precio dado por justiprecio y luchar contra los propietarios de los terrenos, los vecinos del pueblo, para beneficio de los promotores, el ayuntamiento de Corvera fue en contra de sus vecinos.

Muchos de los expropiados todavía están esperando el dinero.

Fue una postura penosa por parte de los políticos de aquellos años" luchar en contra de los vecinos con el dinero de los propios vecinos", no lo hemos perdonado. Se ofrecieron muchos puestos de trabajo, se hicieron grandes colas para dejar el curriculum, pero luego como siempre, los puestos fueron dados a quien ellos quisieron. Lo mejor de este centro comercial aparte de ocho cines, tiendas y cafeterías fue que se hicieron accesos a la autopista porque antes las entradas nos quedaban a dos o tres K". 

Ciertamente la urbanización y el campo de golf que llevaron a la destrucción del cercano pueblo de Truyés en los prados detrás del centro comercial y entre el pantano y Llaranes, con sus casas, hórreos, paneras, árboles y camperas fue especialmente dolosa y los pleitos y polémicas duraron largos años. Continuamos atendiendo a la explicación del mencionado blog:

"Al hacer el centro comercial y los accesos, los promotores inmobiliarios vieron una gran oportunidad de hacer dinero en nuestro pueblo, esta situado en el centro de Asturias, a pocos Km. de Gijón, Oviedo y el Aeropuerto de Asturias, además tenían todas las facilidades por parte de las autoridades. 
Lo primero que hizo el Ayuntamiento fue cambiar en uno de los sitios mejores del pueblo, más de un millón de metros cuadrados de genéricos a urbanos, para hacer una urbanización con campo de golf, los propietarios de los terrenos no dieron importancia a estos cambios, cuando llegaron las cartas con los precios de tasación del suelo se unieron y contrataron un abogado que se ofreció a defenderlos a cambio de un ocho por ciento del dinero que pudiese conseguir por encima de lo ofrecido. 
Fue pasando el tiempo y parecía que el abogado había parado el proyecto con sus alegaciones.

Cuando llegó la hora de pagar la contribución los propietarios debían de pagar una gran cantidad de dinero, y así un año tras otro durante cuatro años, aumentando más cada año, algunos estaban un poco apurados pero el ayuntamiento no tenía prisa, el abogado tampoco ni las promotores y menos los ganaderos que estaban sacando rendimiento a sus terrenos y a los de los vecinos. 
 En 2004 con las elecciones cambió el gobierno municipal, y algunos propietarios asfixiados por los impuestos y de acuerdo con el nuevo alcalde, acordaron vender sus terrenos a los promotores y se realizó el campo de golf con sus casas, y un gran hotel de cuatro estrellas y un spa y gimnasio abiertos a todo el publico, el primer año con precios muy accesibles y los muchos vecinos aprendimos a jugar al golf y nos relajamos en el spa, la urbanización se llama "los Balagares".
Los ganaderos que vivían en Truyés que así se llamaba esta zona, compraron terreno para sus caserías fuera de Trasona. Una de las personas que más sufrió y luchó con este proyecto fue Kuki, se estableció en la zona de Gozón y falleció antes de poder disfrutar de la casa que estaban construyendo a causa de un accidente en su finca, desde aquí un recuerdo para ella por su lucha para seguir en sus tierras.
Mientras se llevaba a cabo este proyecto, aparecieron en escena, como siempre respaldados por el alcalde y concejal de urbanismo, unos ¿promotores? madrileños que pretendían hacer 474 viviendas en unos terrenos de especial protección, donde los propietarios no podían construir una vivienda típica asturiana, situados al lado del centro comercial y del pantano de Trasona.
  
Los propietarios de los terrenos se volvieron a unir y acudieron al mismo abogado de Oviedo que llevaba la expropiación de Truyés, ya que algunos propietarios estaban afectados por los dos casos. 
El abogado volvió a ofrecer las mismas condiciones, y si no se hacía el proyecto no cobraría nada, pero según el no había quien parase una expropiación.
 Como no les parecía suficiente con todo esto, los mismos promotores del centro comercial pretendían construir 1500 viviendas entre el campo de golf y los núcleos rurales de Fafilán y Overo invadiendo mediante un plan parcial los terrenos de los núcleos rurales para construir viviendas de ocho alturas. 
Se pretendía expropiar cerca de dos millones de metros cuadrados en nuestro pueblo..."

Y así continúo aquella epopeya urbanística, uno de tantísimos ejemplos de lo que fue la España de aquellos años con la tristemente famosa burbuja inmobiliaria

 "Los propietarios nos unimos y formamos una "plataforma de afectados por expropiaciones", luchamos contra el Ayuntamiento, contratamos un abogado maravilloso que nos dio consejos, nos hizo alegaciones que fotocopiábamos y entregábamos a todos los vecinos afectados, buzoneamos por todo el concejo informacion, y recogimos 2900 firmas de apoyo, hicimos manifestaciones con pancartas, salimos denunciando en la prensa, visitamos la Junta General del Principado para hablar con todos los partidos políticos buscando el apoyo de la oposición que llevo la causa a debate en la Junta, vinieron todos a Trasona para apoyarnos y conseguimos que no se hiciese nada más que la urbanización del campo de golf, porque muchos de los propietarios querían vender más del 60%.
  El abogado de Oviedo que decía que no se iba a poder parar nada, quedó asombrado cuando lo conseguimos hacer y sin él, aunque decía que no nos iba a cobrar nada nos pidió una cantidad de dinero por las alegaciones que había hecho, todo lo contrario que el abogado de Avilés, que fue una excelente persona, un recuerdo muy especial para él.
 Los promotores de el proyecto de las 474 viviendas que se iban a construir en Gavitos al lado del pantano se habían puesto a vender los pisos antes de tener los terrenos, amenazaron a la presidenta de la plataforma en la prensa con demandarla por estropearles la venta al salir en la prensa advirtiendo que el terreno todavía era de los propietarios que no habían vendido. 
Muchas personas no hicieron caso y dieron dinero a cuenta y como reserva, aprovecharon el efecto 2000, se demostró que los " promotores " no tenían dinero , se pelearon entre ellos y nadie se responsabilizo de nada, hubo mucha gente que perdió todo lo que había pagado.
El proyecto de las 1500 viviendas para Villastur nunca se llevo a cabo, el promotor que era el mismo de Parque Astur, debe de estar dando las gracias a la Plataforma de afectados por no dejarle comprar los terrenos porque con la crisis actual hubiese quedado sin dinero y sin poder construir.
En los terrenos de Parque Astur se construyó además de los centros comerciales el hotel" Parque Astur" de cuatro estrellas, igual que el de " Los Balagares " en el campo de Golf de 18 hoyos y con Spa. y muy buenas ofertas de fines de semana y puentes"

Cruzamos esta calle, Pedro Rodríguez de León, uno de los antiguos señores de Trasona, y pasamos enfrente de la escuela. En el tan recomendado blog de Trasona se nos habla de las varias que existieron en esta parroquia y podemos ver algunas fotos hechas por Cortina, practicante de Ensidesa:
"Los niños y niñas del pueblo que sus padres no eran empleados de Ensidesa acudían a la escuela nacional, había en el pueblo tres escuelas nacionales de niños y niñas, nunca juntos, habia una al lado del cementerio que era solo de niños, otra estaba en el Cueto, y en Gudín de niñas, otra en Santa Cruz y al crearse el barrio de Favila en los años 60 se hizo allí otra escuela para las niñas y niños de la zona. 
Los maestros de las escuelas nacionales en los años 50 y 60. y a los que los niños y niñas de nuestro pueblo deben muchos de sus conocimientos fueron D. Pablo  Morán y D. Manuel, maestros de los niños y Dña Angeles y Dña Delfina, una en Gudín y otra en Favila trataban de explicar a las niñas que tenían que esforzarse para ser iguales en todo a los niños y que tenían que estudiar para poder hacer una carrera. Leer más: https://www.trasonacorvera.com.es/historia/

Y en esta historia de Trasona no podían faltar, por supuesto, el recuerdo de los antiguos profesores:
"No debemos olvidarnos de "maestros", que en esa época enseñaron a leer y a escribir a los niños pequeños de Trasona, lo hacían en sus casas, fueron : Vigón que daba clase en el sótano de la casa de su tía Benigna, enfrente del pobladín, unos años más tarde Luis el de la garbosa daba clase enfrente del poblado de Ensidesa y Josefina que enseñaba en su casa del pobladín a todos los niños pequeños.
Algunas familias alrededor de los años 50-60 comenzaron a enviar a sus hijos a estudiar a Avilés, las chicas estudiaban en el Santo Ángel o las Doroteas y los chicos en el San Fernando o en los Agustinos. 
Los niños de Trasona en los años sesenta empezaron a ir al instituto de Avilés despúes de estudiar primaria en las escuelas del pueblo y años más tarde pasaron a la universidad para estudiar una carrera, otros marcharon a la Universidad Laboral de Gijón"

En la actualidad, en esta Escuela Infantil de Trasona siempre ponen en marcha nuevos proyectos de aprendizaje para sus escolinos, de los cuales dan cumplida noticia los medios de comunicación, como es el caso de El Comercio el 4-4-2019 con De la güerta a la mesa:

"La Escuela de Educación Infantil de Gudín, en Trasona, apuesta por métodos de aprendizaje en los que los alumnos sean los protagonistas y parte activa de las clases. Prueba de ello es su nuevo proyecto educativo, titulado 'De la güerta a la mesa', que se pondrá en marcha mañana viernes, a partir de las 12 horas.
Durante las últimas semanas los alumnos, de entre tres y cinco años, han cuidado de su propio huerto en el aula. Este consistía en una mesa de cultivo que ellos mismos plantaron y han visto crecer. El proceso finalizará con la recolección de las verduras y hortalizas cosechadas junto a sus profesores. En la actividad de mañana viernes está previsto que los pequeños prueben los alimentos y lo harán elaborando su propia ensalada 
Esta contará con lechuga, tomate, aceitunas, zanahoria, maíz o nueces. Precisamente ha sido la lechuga la que ellos han regado y cuidado hasta que ha crecido como para ser recolectada. El objetivo de esta actividad está en que los pequeños valoren el trabajo del campo, la agricultura y el proceso de los alimentos, desde que nacen hasta que pueden ser consumidos"

La llegada de más gentes y la construcción de nuevos edificios unió los diferentes barrios de Trasona extendidos a lo largo de la carretera, haciendo de ellos esa ciudad lineal que llega hasta Avilés por los poblados de El Pobladín, El Cruce y Llaranes (estos dos últimos ya avilesinos y el de Llaranes hasta con su plaza mayor), por eso había una gran relación entre todos ellos:
"Cuando éramos pequeños siempre teníamos un poco de envidia los que no pertenecíamos a Ensidesa a los que si eran y al contrario, ellos por los veranos siempre se iban de vacaciones al pueblo y venían contando historias, nosotros no salíamos de Trasona, no teníamos otro pueblo, además todos los años ellos podían hablar con los Reyes Magos cuando les entregaban los regalos en la Plaza Mayor y nosotros teníamos que dormir toda la noche si queríamos tener regalos.

Ellos tenían calles y aceras para jugar con bicicletas y patines y nosotros caminos que por el invierno se llenaban de barro y charcos.

A nosotros nos envidiaban por tener arboles con fruta que a ellos les encantaba venir a coger y columpios colgados del manzanal y casas más grandes, además cuando helaba nuestros charcos se cubrían con una capa dura de hielo que nos encantaba a todos romper a pedradas"

Un muro separa la escuela infantil de Gudín de la subestación eléctrica. Hasta en este detalle se fija Marcos Palicio en una Trasona tras otra:
"... sólo se separa de la instalación industrial a través de un muro blanco que suaviza el contraste con su decorado de dibujos infantiles: unas setas, unas flores, un tren con payasos... Y unas vacas, acaso las pocas que se pueden encontrar ya en un vistazo a este barrio de Trasona que dicen que un día fue verde y rural. Hoy, en Gudín, frente al colegio, está también la planta química de Fertiberia y por detrás pasa demasiado cerca la inconfundible sucesión kilométrica de naves de Arcelor-Mittal, ahí las de la vieja acería LD2. Aquella fusión física del pueblo con su industria es un resumen válido de lo que ha sido de Trasona en el último medio siglo largo. La forma transparenta el fondo, la normalidad de los niños que juegan en el parque puede bastarse sola para sintetizar lo que ha sucedido desde que la vieja Ensidesa se instaló aquí en los años cincuenta del siglo pasado. La siderurgia explica el aspecto, el pasado y el presente de esta villa peculiar, que se alarga acompañando a la fábrica, pero no necesariamente su futuro. Hace tiempo que se hizo evidente que la industria ha atenuado su antigua fuerza de arrastre, que hay otras Trasonas y que están en ésta".

Y este es el "espeso bosque de torres de alta tensión" al que se refiere Palicio en su artículo: de frente el enlace con la autopista y Parque Astur, que también transformó el pueblo notablemente. Es ahora Fermín Rodríguez quien lo describe en Al calor de la industria, de la serie Viejas y nuevas polas de La Nueva España:
"Las últimas décadas han estado marcadas por la construcción del centro comercial Parque Astur, junto a Tresmonte, la apertura consiguiente de su enlace con la autopista y por la ocupación del suelo rural entre Trasona y Las Vegas para la urbanización Los Balagares, de vivienda unifamiliar, sobre el núcleo de Truyés. Esta urbanización se situó al Oeste del embalse industrial, que ha venido teniendo un intenso uso deportivo y de actividades de ocio y que ha servido de reclamo residencial con la construcción del campo de golf. La nueva urbanización ha venido a colmatar el suelo disponible y a poner en relación directa las distintas áreas urbanas de Corvera, que tienden a formar un único núcleo urbano, directamente unido al de Avilés. Y revela de nuevo la necesidad de actualizar el listado oficial de núcleos de población del Nomenclátor, de raíz preindustrial y totalmente inadaptado a la realidad del poblamiento actual en todo el ámbito metropolitano, que no se ve reflejado en la información geográfica y estadística oficial".

Fermín incide en la característica lineal de los barrios más poblados de Trasona y su dificultad para saltar más allá de la autopista salvo por enlaces como este y o el paso subterráneo de San Pelayo a Fafilán, que encontraremos más adelante, junto con la pasarela peatonal existente al lado de la iglesia, ya más cerca de aquí:
"A la vertebración de la ciudad en Corvera se oponen el trazado de la autopista, las instalaciones industriales y la insuficiencia crónica de las infraestructuras de relación entre sus componentes, algo tan habitual en la región y en el área metropolitana que casi pasa desapercibido. Y que da como resultado una ocupación lineal del suelo de las vegas y áreas bajas y semillanas, apoyándose en las carreteras, vías de ferrocarril y en las inmediaciones de las factorías y polígonos industriales. Mundo urbano de difícil ordenación, inacabado y de paisaje duro, que retrae el crecimiento de población, salvo cuando se trata de áreas de nuevo cuño y perspectivas. Y que deja al margen, incomprendido, al poblamiento rural tradicional"

La autopista, que oímos pero no vemos (otro grave problema en Trasona es el de la intensa contaminación acústica), supuso otro periodo de dolorosas expropiaciones al empezar los años de la década de 1970, tanto de fincas como de casa, por las que se pagaron indemnizaciones muy pequeñas:
"Muchas familias vieron como casas que ya habían pertenecido a sus padres, abuelos, casas muy antiguas, llegaban las excavadoras y en un visto y no visto la casa estaba destruida, con los hórreos, al ser un monumento regional, no se podían derrumbar por lo que se desarmaban y se volvían a armar en otro lugar.
Fueron tiempos difíciles para todas las familias afectadas ya que no les dejaban construir una nueva casa o cuadra en sus fincas por estar todo Trasona considerado zona industrial en el PGOU, al fin se consiguió autorización para construir a los expropiados, todas las casas tenían una construcción parecida, era el modelo de casa asturiana de labranza en los años setenta. 
La autopista cambio la vida del pueblo, lo dividió en dos partes, la norte más urbana e industrial y la sur más rural. Los vecinos teníamos que rodear mucho para poder ir al otro lado de la autopista y hasta los muertos después del funeral tenían y tienen que dar un paseo bastante grande hasta el cementerio. 
La autopista se construyó de cemento con ranuras, dijeron que daba seguridad con lluvia pero que provoca un ruido tremendo al pasar los coches y afecta en el sistema auditivo de los que viven a un lado y al otro de ella.
Los primeros meses y hasta el primer año, había un accidente por semana en el tramo que pasa por nuestro pueblo, los coches daban vuelta de campana, se caían a la mediana o chocaban al adelantar, todo fruto de la inexperiencia, por suerte, no eran muy graves y los vecinos acudíamos a auxiliarlos, entonces no había vallas en la autopista y no pasaban tantos coches como ahora"

Desde aquí es posible que veamos parcialmente el edificio principal del centro comercial Parque Astur, el cual imita la arquitectura urbana del centro histórico avilesino, en concreto el edificio del Ayuntamiento en su forma, con reloj y cúpula. Tal es la compenetración de estos concejos con la que es cabeza de comarca y antigua capital de alfoz. Hemos visto por ejemplo tarjeta de visita de cecinos en las que ponen "Trasona-Avilés" en vez de Trasona-Corvera"


De estos cambios, que llegan a nuestros días ya, afirma también Fermín Rodríguez en su artículo:
"Trasona se alarga siguiendo las instalaciones fabriles de la antigua Ensidesa, sobre el eje de la carretera Avilés-Gijón, constreñida entre las instalaciones industriales y la autopista. Las barriadas se suceden de Oeste a Este, sin interrupción, entremezcladas con las áreas empresariales. La modernidad metropolitana vino de la mano del centro comercial y de la nueva urbanización unifamiliar con campo de golf, con el embalse como centro de atracción. Difícil reordenación y actualización de un modelo urbano desarticulado que debe mejorar la relación entre sus componentes y la integración paisajística con el modelo industrial de grandes factorías"

Bordeamos la rotonda hacia la derecha: aunque siga habiendo aceras no descuidemos ir pendientes del tráfico, pues desgraciadamente no son infrecuentes los accidentes, aunque mayormente queden en sustos. Por ello vamos a buscar el paso de cebra que cruza hacia los edificios de El Pedrero o El Pedréu, topónimo vinculado evidentemente a la piedra


Pese a su altura, cuando los edificios se construyeron no pusieron ascensores, que por entonces no eran obligatorios, hubieron de ir poniéndose un par de décadas después


Justo enfrente de estos primeros bloques sigue nuestro camino por la acera de la AS-19: viendo ya al fondo, al lado de la carretera, toda una institución en Trasona, Casa Generosa, afamado restaurante trasoniegu, frente al que vamos a pasar, fundado en 1953 por Doña Generosa, continuando luego al frente su hija Luisa


Repasando las narraciones de la Historia de Trasona comprobamos que Casa Generosa representa también muy bien aquellos años "cuando llegó la empresona", en los que la población cambió para siempre, de rural a urbana e industrial, algo palpable también en las fiestas y el ocio:
"En este tiempo en nuestro pueblo se hacían muy buenas fiestas, teníamos carrozas que salían con la reina y sus damas de honor, las carrozas las hacía Isidro, un personaje muy popular y emprendedor de aquella época 
Había romerías y partido de futbol de solteros contra casados. 
Se empezó también en los años sesenta la gira al pantano del día 1 de Mayo para celebrar la fiesta del trabajo, venía gente de toda la comarca.
En Trasona, antes de esta época teníamos algún chigre donde los paisanos jugaban a las cartas y tomaban sidra o "pintas" de vino.  
Estaban el bar Braulio, el Blanco, el Varela, etc. Con la llegada de la empresa se empezaron a construir bares, en casi todos se daban comidas..."

Si bien ya había chigres y alguna tienda, para atender a aquella creciente población se abrieron muchas más


En el caso de Casa Generosa extraemos esta información de su propia página web:
"Aunque actualmente ya no regenta esta casa, desde esta web queremos rendir un pequeño homenaje la fundadora de Casa Generosa,la señora D.Generosa. 
Fue gracias a su trabajo y esfuerzo como esta Casa vio la luz allá por los primeros años de la década de los 50 del siglo pasado. Tras años de trabajo en este restaurante y tras su jubilación fue su hija Luis quién siguió regentando esta casa continuando con la tradición 

El Camino continúa por la acera todo de frente, pero hemos de decir que antaño estuvo señalizado para cruzar y seguir por la calle detrás de Casa Generosa. No sabemos si se hizo  para evitar la carretera en este trecho o se trata del trazado del antiguo camín real. Sea como sea no ofrece en sí nada especial ni ningún vestigio caminero histórico, solamente un cierto rodeo para volver a esta carretera al llegar a la iglesia, luego de pasar entre la ruidosa autopista y los edificios del fondo

Sí podemos decir que por un camino desde Casa Generosa estuvo la casería de Casa Ulpiano, El Ferreru Trasona, que tenía allí su fragua, desaparecida cuando fueron expropiados y se mudaron a Silvota. El lugar siguió no obstante llamándose El Ferreru. Su hijo tuvo la marmolería Marmográn, al lado del cementerio, que quedó separado de la iglesia también por la antigua "Y" y actual A-8

De Casa Generosa, una de nuestra excelentes fuentes de información, El Rincón de Trasona, dice esto:

"Generosa, madre de Luisa, David, y Alicia, era una excelente cocinera. Alicia trabajó en la cocina con su madre, Luisa llevaba leche  para vender en Avilés.

En la barra del bar, además de los empleados  estaba el marido de Luisa, Manuel, un entusiasta de la poesía.

Estuvieron a cargo del negocio muchos años, luego el hijo de David, Bautista lo regentó con su esposa unos años, actualmente éstos, tienen un restaurante asturiano en Águilas, Murcia "Casa Menéndez"

En el mismo blog sigue la historia de esta saga de hosteleros en Bautista, un trasoniego que triunfa en Murcia:

"Bautista, hijo de David y Luisa. Él, de "Casa Generosa"  y ella dueña de una mercería durante muchos años en el Pedrero y Tere una candasína tranquila y afable que guisa  como nadie. 
Como él cuenta, fue al Cristo y enamoróse, ese amor dura unos cuantos años que valen doble, porque pasan todo el día juntos, primero se establecieron en Trasona en el restaurante de Generosa, su abuela, famoso por su comida casera. 
Gracias a la buena mano de Teresa en la cocina y la simpatía de Bautista cara a los clientes, su restaurante estaba siempre lleno, pasando numerosos famosos por nuestro pueblo para probar sus platos. 
En esta época se emitió un reportaje en la  televisión asturiana, ahora al contemplar las imágenes  vemos las tablas que ha cogido Bautista a lo largo de estos años. 
Su etapa en Trasona duró doce años, tuvieron dos hijos y vivieron en los pisos Sonia, al lado de Olga, otra trasoniega que también está en Murcia y a la que dedicaremos una nueva entrada (...) 
El negocio iba bien y quisieron invertir en algo donde pudieran ir a tomar el sol y retirarse cuando fuesen mayores, cruzaron España y se plantaron en Águilas, ciudad costera murciana muy próxima a Almería, en una urbanización construida por un grupo asturiano que les infundían todas las garantías. 
Cuando llegaron y contemplaron las imágenes que se veían desde su urbanización quedaron enamorados.

Les daba pena tener una casa tan guapa en un sitio con tan buen tiempo para solo disfrutarla un mes, así que se liaron la manta a la cabeza y se trasladaron a vivir definitivamente a Águilas para enseñar a los murcianos como se come de bien en Asturias. 
Como se come y como suenan las gaitas asturianas, desde hace unos años celebran unas jornadas de "homenaje a la faba" en diciembre, donde premian a los murcianos que destacan por su humanidad y saber hacer (...) 
Les han dedicado páginasentrevistas desde Asturias  poesias y honores en Murcia. Bautista nos ha entregado un dosier con todas, destacamos la primera:

Al restaurante Asturiano Casa Menéndez 
de Aguilas

Hay en un pueblo murciano
que es Águilas un local ,
de estupenda calidad, 
un restaurante asturiano que aconsejo visitar.

A conocerlo y comer
yo fui con mi mujer
en este fin de semana;
Casa Menéndez se llama,
más y mejor ya no cabe
pues hay que ver que bien sabe
la gran cocina asturiana,
con sus riquísimas fabes en tierras mediterráneas.

El ir a Casa Menéndez 
es gozar de buena mesa,
con un trato que sorprende,
donde Bautista te atiende
y te cocina Teresa.

Volveremos más de un día
a este bendito lugar
que nombrarlo da alegría 
y que ofrece su manjar
en Calle Reina Sofía.
Que muy pronto te conquista
por su confort, su belleza
y su extremada limpieza, 
que regentan dos artistas:
Esa excelente pareja 
que son serán Teresa 
y su marido Bautista. 
Marcos Salvador Romera "EL NIÑO VERSOR" 

 Son famosos, sobre todo Teresa, en programas de cocina de la televisión murciana. Su historia y su restaurante salieron en un reportaje de "Comando Actualidad" como mediadores entre la cultura asturiana y murciana"


A nuestra derecha, justo enfrente de Casa Generosa, un mojón jacobita al lado de esta explanada de aparcamientos


Más allá, al lado de la parcela que fue del antiguo Centro Cultural, Deportivo y Recreativo de Trasona  estuvo la Pensión Ca Verdeja, con los hermanos Pilar, Amparo y Pepe. Hoy es una residencia de mayores, dicen en El Rincón de Trasona:
"Las recuerdo en aquella cocina grande de su pensión, ofreciéndote algo dulce cuando te acercabas a visitarlas,  cariñosas y agradables siempre intentaban agradar a todo el que las conocía"

La antigua cancha deportiva que existió antaño había sido transformada en parking, pero fue reabierta como pista de deportes en 2016. Así daba la noticia El Comercio el 8 de octubre de ese año:
"Tras dos meses de obras, el Ayuntamiento de Corvera abrió ayer al público la nueva cancha polideportiva de El Pedrero, en Trasona, para cuya construcción el consistorio local ha invertido 140.000 euros. Este nuevo equipamiento «viene a saldar una deuda histórica que había con los vecinos de Trasona, que pedían una instalación de estas características desde hace años, -desde que Arcelor convirtió en parking la cancha que existía" (...) declaró Iván Fernández, alcalde de Corvera. 
Representantes del tejido asociativo de len la mañana de ayeresta mañana el nuevo equipamiento construido en una parcela de propiedad municipal de 3.000 metros cuadrados, muy próxima al Centro Cultural de Trasona, en el barrio de El Pedrero. «Hemos podido construir esta cancha gracias a la entrada en vigor del nuevo PGO que logramos sacar adelante el año pasado y que puso a disposición del Ayuntamiento este terreno que por fin alberga la pista polideportiva y los espacios verdes colindantes», detalló el alcalde en el transcurso del acto inaugural"

Al lado del viejo Centro Cultural y Recreativo de Trasona estuvieron también la tienda de Gago, especializada en electrodomésticos, y la barbería de Germán


Aquí abajo hay una antigua fuente, en un pozo a la derecha de la acera, abandonado desde que se dispone, tiempo ha, de agua corriente en las casas y que, como elemento del patrimonio de Trasona y el Camino Norte, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en el año 2015, bien merecería una, a lo que parece no sería muy costosa, restauración


En algún momento, sin duda anterior a su caída en desuso, fue su pozo habilitado con muro de hormigón y ladrillo para guardar lo que parece el elemento más antiguo, una muy pequeña columna de piedra con un caño metálico del que mana agua. Unas escaleras, tres peldaños, bajan a él


Esta es una foto más reciente en la que comprobamos que el deterioro parece avanzar de manera muy preocupante. La presencia aquí de esta fuente, al lado de la carretera e inmediaciones del camín real, nos lleva a pensar que, además de por el vecindario, debió ser en tiempos pasados, cuando este manantial tendría otro aspecto, dar servicio a los viajeros y sus caballerías


El agua es fuente de vida, ahora es abrir un grifo y la tenemos, antes era una preocupación constante, incluso en estos caminos del húmedo norte. Vamos a compartir lo que dice la Xacopedia para hacernos una idea:
"El agua es el único sustento imprescindible que el peregrino necesita en el Camino para sobrevivir. Esto, que puede parecer excesivo en el presente, donde el acceso al agua es posible casi a cada paso, resultaba trascendental en el pasado, sobre todo en la Edad Media. Era necesario garantizar un acceso más o menos regular a ella. Por dos elementos de la naturaleza, el agua y la piedra, pasan gran parte de las tradiciones, simbologías y necesidades de la cultura jacobea de siempre. Son dos grandes símbolos de la vida y de su perdurabilidad, ya sea física o espiritual. 
El agua está presente, en distintas formas y usos, desde el primer momento de la cultura jacobea. Santiago, un pescador del lago Tiberíades de Palestina, viaja a Occidente por mar, hace brotar fuentes como la del Santiaguiño, en Padrón, marcha a Palestina de nuevo en barco y regresa muerto a través del mar. Por último, es enterrado en el lugar que marcan milagrosamente unos bueyes que se detienen ante una fuente. Todo lo que acabamos de señalar se funde con el mito, pero están las evidencias. 
El agua tenía dos grandes significados para el peregrino medieval: el espiritual o sagrado, heredero en determinados puntos del Camino de los viejos rituales paganos, y el utilitario. Este último lo entendía como un sustento para el cuerpo y un inconveniente para el Camino, que transitaba y transita por tierras norteñas, donde la lluvia es frecuente, sobre todo, en invierno y primavera. 
En el Codex Calixtinus (s. XII) hay pistas que ayudan a comprender esta relación. En lo que parece un símil de la propia peregrinación, se vincula a los apóstoles con las nubes que se trasladan de un lugar a otro llevando agua para regar los terrenales corazones resecos de los hombres con las lluvias saludables de la palabra de Dios. 
A medio camino entre las necesidades del espíritu y el cuerpo, presenta el agua como la bebida de la paz del espíritu. Hasta tal punto es así, que la recomienda a los peregrinos para evitar la denostada borrachera: “El vino aguado, bebido con moderación, hace al hombre sano, alegre, elocuente, sobrio, fuerte y hablador”. 
La vertiente utilitaria se presenta en el Calixtinus relacionada con el agua de los ríos, que preocupa mucho a Aymeric Picaud en la Guía del peregrino (libro V). Las aguas fluviales representaban una grave dificultad de paso para lo primeros peregrinos, pero también eran lugar privilegiado para el descanso, la higiene e incluso para satisfacer la sed. En aquel tiempo, animales y personas tenían por costumbre beberlas. Por eso Picaud, supuesto autor del libro V, va explicando como son las aguas de cada uno de los muchos ríos que se encuentra a su paso, mortíferas unas, asegura, saludables y agradables, las más, como las del Ebro y los ríos gallegos. “He descrito así estos ríos para que los peregrinos que se dirijan a Santiago procuren evitar beber en los que son mortales y puedan elegir los que son saludables para ellos y sus cabalgaduras”, concluye. 
Purificación  
El agua aparece también como elemento purificador del cuerpo que se transmite al espíritu. El ejemplo más característico lo encontramos en el río de Lavacolla, ya próximo a Santiago, recomendado al peregrino para lavar el cuerpo entero, algo que sólo se propone aquí, a las puertas de Compostela. La higiene corporal no era prioritaria en la Edad Media, por lo tanto esta limpieza integral en las cristalinas aguas de un río respondería a un ejercicio de purificación. Lo hacían “por amor al Apóstol”, se dice, y lavaban “no sólo sus partes, sino también, después de quitarse la ropa, las suciedades de todo el cuerpo”. 
Era también el agua el último auxilio del peregrino antes de entrar en la casa de Santiago. Con esa intención se construyó la recordada fuente del Paraíso, en la praza da Azabachería compostelana, ante la puerta francígena, la gran entrada de los peregrinos en la catedral. “De sus bocas -explica el libro V- salen cuatro chorros para calmar la sed de los peregrinos y de los habitantes de la ciudad”. Por referencias posteriores, se sabe que aprovechaban para lavarse de nuevo, con un trasfondo de purificación evidente, antes de entrar en el templo de ansiado señor Santiago. 
Es curioso. El Calixtinus cita muchas menos fuentes que ríos, quizá por la escasez de ellas. En relatos posteriores de peregrinos no se manifiesta una gran preocupación por esta cuestión. Interesa más el itinerario en si, quizá porque las fuentes se habían extendido por el Camino con ese sentido solidario y de recurso a compartir que siempre las acompañó. El agua no se le negaba a nadie, y menos al que llegaba por el Camino. Surgía de forma espontánea y resultaba imprescindible: un don sagrado, por lo tanto. Algo que se podía y, sobre todo, se debía compartir. 
Fue también, el agua, en su expresión más simbólica, para transmitir el amor y la hospitalidad con los peregrinos. Conocido es el ritual del lavatorio de pies practicado, imitando a Cristo, en algunos antiguos hospitales, incluso en alguno de los que en el presente intentan preservar la conexión con el pasado. Se recibía al peregrino, al desconocido, con la humildad y la transparencia de su fuerza reparadora. 
Sin embargo, el camino del agua del pasado al presente es un camino de pérdidas. Al contrario que la piedra, que conserva para los nuevos peregrinos parte de su vieja capacidad representativa, el agua se ha convertido en un recurso de consumo al que se accede sin más. Los peregrinos pioneros de la contemporaneidad todavía pudieron oír palpitar al viejo Camino en las numerosas fuentes esparcidas por la Ruta. El desarrollo urbanístico, la falta de sensibilidad y las nuevas exigencias sanitarias -en muchos casos, con razón- acabaron con el recurso natural más esencial y más accesible del Camino. Hoy son poco más que una anécdota. 
Queda la posibilidad de poder acceder a algún curso fluvial, pero siempre con reservas. Y nunca para beber. El Camino ya no ofrece grandes alegrías en este sentido. Tampoco las echan en falta la mayoría de los caminantes. Lo único que no ha cambiado es el agua de la lluvia, siempre purificadora e imprevisible. Y en el Camino, siempre reveladora, para quienes la quieran ver así"


Seguimos ruta: a nuestra derecha vivienda de traza entre urbana y campesina y a la izquierda más bloques de pisos de los que se construyeron tanto para trabajadores como para vecinos expropiados. En sus bajos abrieron y abren comercios, bares y entidades bancarias


En una vivienda de dos pisos que pertenecía a Ca Rosa, sabemos que vivían, abajo, María Luisa y Manolo, un matrimonio procedente de Grao. Ella daba clases a los niños en los años del 1960, mientras su marido y el hermano de este, Ángel, hacían madreñas que luego numeraban y metían en sacos para ponerlas a la venta


Aquellas madreñas tenían fama de perfectas, pulidas y brillantes. Con el sobrante de la madera de hacerlas se alimentaba la estufa de la escuela de María Luisa


Más de aquellos edificios del barrio hechos en cinco pisos sin ascensor en su momento. Aquí vivió de crío el escritor Roxelio Crespo, al que glosa también Marcos Palicio, en otro artículo, Trasona esta de Paso, para la serie Viejas y nuevas polas de La Nueva España, pues sus vivencias y recuerdos forman parte de esta metamorfosis continua que acontece periódicamente en estos valles de Tamón y Trasona: 
"El escritor, que publicó en 2007 sus «Cuentos encantaos» (Trabe) y trabaja en su primera novela histórica, nació en 1971 en Tamón (Carreño) y una de esas ironías del destino hizo que fuese precisamente la obra de la autopista «Y» la que decidió al año de su nacimiento la «expulsión» de su familia expropiada, trasladada a Trasona y al barrio de El Pedrero, a esos bloques de pisos situados junto a la autopista y enfrente del acceso corverano a las instalaciones de Ensidesa, hoy Arcelor Mittal. Aquí sucedió todo, primero aceleró y luego frenó el poder de arrastre social de la siderurgia (...)
Roxelio Crespo se recuerda «con catorce o quince años» corriendo por los prados que hoy ocupa Parque Astur y que antes alojaron una gran plantación de kiwis muy protegida con perros y vallas. «Ese cambio físico», rememora, «ese ver un centro comercial -el primero que hubo en la comarca de Avilés- donde no había casi nada fue un motivo para pensar que tal vez Trasona tenía alguna esperanza. Hoy soy pesimista». De regreso al presente, el escritor corverano aprecia con disgusto que «nadie mira por Trasona», que «veo a la sociedad un tanto desarticulada», desde su punto de vista tal vez con el músculo social envejecido y «algo apático», doliente por la pérdida de alguna asociación de vecinos y de aquella otra villa en la que las fiestas de San Vicente, el patrón, no dejaban aparcar los primeros domingos de julio. «Nunca vi tanta gente aquí».

Abajo está el bar La Trastienda, que ofrece menús y pinchos calientes. En el bloque central hay una entidad bancaria. Más allá tenemos el pub La Factoría y el bar La Otra. Luego, en una casa de tejado a dos aguas, abres sus puertas otra institución gastronómica de Trasona: Casa Xavina, de la que hablaremos enseguida. Lo cierto es que en los bajos de estos edificios hubo varias tiendas y bares, que fueron cambiando de nombre con el paso del tiempo, nos enteramos una vez más gracias a El Rincón de Trasona:
"En los años 60, se construyó un  edificio  muy grande, la primera parte daba para la carretera Avilés-Gijón, en este edificio, en el chaflán al lado del restaurante Xavina, pusieron un bar, su dueño un chico de La Marzaniella, se llamó "Bom Blan", Mongo lo recuerda bien porque conserva  un trofeo de ajedrez que subvenciono dicho bar, después se traspasó a Gago, que fue quien lo lanzó y más tarde el dueño fue Pepe el hijo de Germán y su esposa Tasi, le pusieron el nombre de "Las Jarras"  primero el matrimonio, había estado regentando el bar del Centro Cultural y Recreativo de Trasona.

Era el centro de reunión de toda la juventud de Trasona, hoy continúa abierto  con el nombre del Rincón del Sol.

En ese edificio también estuvieron y están más bares, pero fueron posteriores a los años 70.

Luisa, mujer de David el del "Generosa", puso  una mercería también el el mismo edificio, David había sido lechero muchos años.

Otra tienda que se puso en el mismo edificio fue la de Mari Paz, la mujer de Alberto Alvarez, hermano de Ángel "el carnicero". Era una tienda de comestibles y ultramarinos.

Mari Carmen, una  la mujer de Ton, desde muy joven tenía la peluquería en  un piso de la casa de Generosa, al lado del Restaurante, en los años 70, cuando se construyó la parte de atrás del edificio de las Jarras,  trasladó allí su peluquería y su casa"

En esta calle estuvieron la tienda de electrodomésticos de Gago, así como la barbería de Germán y luego el taller de bicicletas de José Antonio Rodríguez. Pasada esta casa es el bar El Pacífico, en el Centro Cívico de Trasona, donde más antiguamente se ubicaban el salón de baile El Humedal en el piso alto y en el bajo un taller de motos. Luego se hizo el Centro Cultural, Deportivo y Recreativo de Trasona, una entidad con muchos socios que era célebre porque había que subir por unas escaleras muy empinadas, sucesoras de las del antiguo baile. Tenía bar y en sus dependencias se celebraban  reuniones y conferencias, celebrándose en los salones bailes como los de Fin de Año, de disfraces, comedias teatrales campeonatos de parchís, cartas, billar, etc. 


En el centro también se construyó una piscina, la primera que hubo en Trasona, así como una pista de tenis, organizándose clases y competiciones. Volvemos como siempre a estos blogs de Corvera y Trasona:
"... pero a últimos de los años noventa la casa del centro amenazaba ruina y el Ayuntamiento llegó a un acuerdo con los socios para derribarlo y construir un centro municipal es un local grande con una cafetería en la parte de abajo para que los que se pasen no bajen a " rollones " como antiguamente bajaban por las escaleras los que se pasaban un poco, tiene unas salas muy amplias para reuniones o exposiciones, biblioteca y un salón para conferencias en la parte alta, con ascensor para las personas impedidas, pero ya no es lo mismo , ya no se celebraron más fiestas de Fin de Año, la música retumba mucho, uno de los actos principales es la noche de reyes en la que los Reyes Magos después de recorrer el pueblo subidos en unos tractores y regar el pueblo con caramelos, que regalan a los niños, reciben a todos los niños de Trasona recogen las cartas y les hacen un regalo a cada uno posando con ellos para la foto. Al hablar del centro no podemos olvidarnos de Ángel y de Chas que fue el alma del centro y de las fiestas durante muchos años, ahora su hija Noelia a cogido el testigo de su padre esperemos que relance el centro como en sus años de oro. Leer más: https://www.trasonacorvera.com.es/historia

La idea de aquel histórico centro cultural partió de un grupo de vecinos y amigos de Trasona que estimaban oportuno contar con un local social donde leer la prensa, jugar a las cartas, organizar tertulias y demás actividades que pudiesen surgir:
"La Sociedad Centro Cultural, Recreativo de Trasona comienza su andadura en una reunión celebrada el 10 de octubre de 1961 por Ángel Menéndez, Arcadio Rubín, Manuel A. Martínez, Luis A. Menéndez, Jaime Gonzélez, Óvido Suarez, José M. Gutiérrez, Manuel Gutiérrez, Cirilo Muñiz y Pablo Morán Corona, para tratar de la creación de un Centro Cultural y Recreativo, "donde los socios puedan disfrutar de sus momentos de descanso en un ambiente sano y moral".

Ángel Menéndez Suarez, sale elegido presidente. Estará al frente de la sociedad hasta el 24 de Noviembre de 1962, que es nombrado presidente José Luis Ureña Fernandez.

El local que eligen como sede de la Sociedad cultural era propiedad de la familia  "el Castañeo", que durante unos años regentaron en él,  el salón de baile "El Humedal

Era un primer piso con escaleras empinadas que propiciaron alguna que otra caída cuando no se bajaban con todos los sentidos, los socios lo alquilan y acondicionan conforme a sus intenciones, colocan un billar, mesas de pin-pon o tenis de mesa,  sillas, mesas, un pequeño bar que regentarían distintas familias de Trasona a lo largo de todos aquellos años.

Durante estos primeros años fueron frecuentes los ciclos de conferencias en el Centro, así como funciones de teatro, torneos de mus, brisca, tenis de mesa, billar, parchís...

Una de las primeras  televisiones  que llega a  Trasona, la trae Ureña para El Centro Cultural.Se realizan distintas fiestas y bailes, son famosas las de  carnaval y Noche Vieja donde se reunía casi todo el pueblo y alrededores.

El 26 de octubre de 1968, toma el relevo en la Presidencia Eleuterio Gago Asensio que está en el puesto hasta el 7 de febrero de 1975, durante su mandato se inicia la tramitación de la Cancha Polideportiva y se construye la Piscina de la Sociedad, que se inaugura el 15 de agosto de 1972.

A raíz de la construcción  de la piscina comienzan  a impartirse clases de natación donde acuden niños, jóvenes y mayores de Trasona y sus alrededores, los socios tienen la entrada gratuita y  todos los demás deben de pagar la entrada para contribuir al mantenimiento de la piscina. Se forman grupos de natación y se realizan  competiciones

En el revistín de las Fiestas de San Pelayo, que edita SOFETRA, en 1974 Eleuterio Gago, hace recuento de todas las actividades que se celebran en el Centro que preside, lo titula: "Nuestro Centro  Cultural"

Gago resalta "las conferencias que se celebran, así como el acondicionamiento de la biblioteca con la adquisición de libros en lo cultural y en lo recreativo competiciones de brisca, tute y mus, bailes sociales en diversas fechas a cargo de los jóvenes y dominicales bailes vermut"

También presume de "piscina, cancha polideportivo donde se celebran campeonatos de fútbol de salón, prácticas de hockey sobre patines ...

El presidente que sucede a Gago es Víctor González Muñiz, su mandato dura un año.
El 28 de febrero de 1976 es nombrado presidente Manuel Penín Álvarez, en su mandato se compra el terreno anexo a la piscina y cancha. 
El 23 de febrero de 1980, vuelve a tomar el cargo Eleuterio Gago hasta el 24 de febrero de1984 en esta fecha se hace cargo de la presidencia José Avelino "Chas". 
Durante su mandato, se procede a la adjudicación el  1 de abril de 1986 de las obras de reparación total de la piscina de la Sociedad y la construcción de la piscina de chapoteo. 
El Centro tuvo años de esplendor, se realizaron grandes funciones de teatro, desfiles de moda, se impartieron clases  y torneos de tenis, gimnasia,   fútbol sala, natación... 
José Avelino Iglesias "Chas", cesa en el cargo el 29 de diciembre de 1992, fecha en la que toma posesión Jose Angel Rodriguez del Rio, estando al frente de la sociedad hasta cuatro años más tarde. 
En 1995,  se comienza a realizar la cabalgata de Reyes, con los tractores de los vecinos y  la colaboración del Ayuntamiento de Corvera, siendo alcalde Victor León y la aportación económica de los comerciantes de Trasona para comprar regalos,  se lleva la alegría a los niños de Trasona, la idea surge Lorenzo Hernandez Francisco, miembro de la directiva en aquellos años. 
El 22 de noviembre de 1996 es nombrado presidente de nuevo José Avelino Iglesias, hasta su fallecimiento (agosto de 1998). 
Se hace cargo de la presidencia en funciones, el vicepresidente, Lorenzo Hernandez Francisco, cesando el 30 de octubre de 1998, fecha en la que es nombrado presidente de una Junta Gestora Miguel Nieto González, hasta el 21 de noviembre de 1999, que se hace cargo de la presidencia de la Gestora Lorenzo Hernández Francisco, hasta octubre del año 2000, que nuevamente vuelve a ser presidente de la Gestora Miguel Nieto González. 
El viejo local del Centro Cultural y Recreativo de Trasona amenaza ruina, el Ayuntamiento de Corvera llega a un acuerdo con la sociedad, compra el edificio al dueño y después de un tiempo lo derriba  para construir un nuevo Centro Cívico, durante el tiempo que duró la construcción se celebró el baile de carnaval en una gran carpa colocada en la Cancha deportiva. 
El nuevo Centro Cívico "José Avelino Iglesias" se inaugura el 8 de junio de 2001, es un nuevo local con salas de arte, exposiciones, conferencias, biblioteca, bar, pequeños locales para las asociaciones de Trasona y uno más grande como sede de la Asociación del Centro Cultural,   tiene ascensor para que puedan acceder todas las personas y calefacción. 
En el nuevo Centro se celebran exposiciones y se hacen reuniones de todos los ámbitos, se imparten cursos y se celebran grandes partidas de parchís. 
Pero no es lo mismo, ya no tiene el mismo encanto, los que conocieron el viejo Centro lo echan de menos, ahora no se celebran bailes con orquestas, porque retumba mucho el sonido.
En el año 2006 ACELOR recupera los terrenos que había cedido a la Sociedad para hacer la cancha de fútbol, para construir una nueva entrada para la empresa y la Sociedad  del Centro Cultural  y Recreativo de Trasona se queda solo con las instalaciones de la piscina y la cancha de tenis. 
La noche del 5 de enero sigue siendo la más mágica en el Centro, los niños aclaman a los reyes y reciben sus regalos, ahora hay problemas porque Trasona ya se ha quedado sin tractores porque ya no hay tantas caserías como hace unos años, pero lo solucionan con camiones. 
El 18 de Noviembre de 2011, se celebran las elecciones a la presidencia, resultando elegida Noelia Iglesias Caamaño, hija del José Avelino Iglesias "Chas" que permaneció en la misma hasta su dimisión el 4 de junio de 2015, que es nombrada de nuevo una Junta Gestora cuya presidencia asumió Pablo Amieva Fernández 
Se celebran exposiciones, se dan clases de pintura, informática  y se han celebrado representaciones teatrales. 
En todos estos años dentro de esta sociedad se han creado distintas secciones, tanto culturales como deportivas, participando en campeonatos de brisca, parchís,  mus, se han creado equipos de natación, fútbol sala (escuela de fútbol), tenis , grupo de pesca, grupo de teatro, organización de la Cabalgata de Reyes de Trasona, marchas y excursiones ciclo turistas...."

Nos dirigimos al cruce de la entrada a ArcelorMittal mientras tenemos a la izquierda Casa Xavina, otro de los célebres establecimientos de Trasona, fundado en 1955, en pleno despegue siderúrgico y poblacional, cuando acudían a comer los empleados de Ensidesa y se servían banquetes de boda, estando muy bien atendido por Ramón y Pacita, ayudada esta en la cocina por su hija Susi. Eso conocemos gracias también a El Rincón de Trasona:
" restaurante Casa Xavina, regentado por Ramón, pero en sus cocinas siempre estaban las mujeres, yo recuerdo con cariño a Pacita ayudada por su hija Susi preparando ls comidas y colocando los comedores en la planta de arriba.

La cafetería del centro también estuvo atendida por muchos matrimonios, en los que casi siempre la que estaba al pie del cañón era la mujer"


También daba y sigue dando comidas, en sus comedores de abajo y arriba trabajadores de otras empresas de Trasona, vecinos, viajantes, repartidores, viajeros, camioneros y todos los que deseen probar la magia de sus fogones, incluyendo desde hace ya unos años a los numerosos peregrinos que pasan por aquí y que desean llegar comidos a Avilés. Relacionado a su trato con los romeros destacamos este apunte en la página Pilgrino:
"Para el que tiene por costumbre comer de restaurante poco antes de llegar a su destino. Casa Xavina está a unos 4 km del centro de Avilés. Además de ponerse uno tibio (...), disfrutará de un trato fabuloso de los camareros y hasta de algún parroquiano con el que compartir charla mientras llega el siguiente plato. Frecuentado por «currelas» de las fábricas cercanas lo que no deja de ser una garantía para el que quiere comer bien y abundante. Restaurante Casa Xavina: Barrio de Pedrero, 2 (Trasona)"

En nuestros días, aunque ya no es la familia fundadora la que lo regenta, siguen haciendo gala de su buena cocina y menús. Seguimos leyendo algunas de las críticas gastronómicas existentes:
"Poco a poco Rubén va ampliando la oferta gastronómica y hoy nos toca probar el cachopo y de primero una sopa de pescado dejando sitio para los postres caseros Merece la pena venir un sábado Tranquilo y cumpliendo con la normativa COVID19 Acepta pago con tarjeta"
"Muy bueno el menú en el Xavina ,Limpieza y tranquilidad .El dueño Ruben de lo mejor .Muy buen profesional y mejor persona .Siempre pendiente del cliente .Para repetir, sin duda" 
"En esta ocasión le encargamos unos pollos asados y costillas que para nuestra sorpresa también están en el menú del sábado así que de primeros una fabada; pasta y ensaladas y luego platos a compartir de pollo y costillas. Postres variados de la casa; cafés" 
"Siempre en agradable volver a comer al Xavina. Buen ambiente. Si coincide que tienes que comer de las 13 a 15h esta al completo; pero después no hay problema. Varios primeros donde no faltan buenas ensaladas y algún plato de cuchara. Un segundo a la espera de un postre variado: arroz con leche; yogur etc. Para volver"

 Como nota curiosa Casa Xavina saltó a los medios por repartir varios décimos bien premiados de la Lotería de Navidad. noticia recogida por T. Cembranos en La Nueva España el 23-12-2006 y titulada El regalo del abuelo Reguera:
"Manuel Ángel Suárez, más conocido como «Reguera», hizo ayer un poco más feliz a su familia al entregarles el mejor regalo de Navidad, 350.000 euros. Reguera, de 80 años y vecino de Villanueva (Gozón), compró seis décimos del número 79.735 en el restaurante Casa Xavina, ubicado frente a la entrada de Arcelor en Trasona, y el propietario del establecimiento le regaló otro. 
En total, siete décimos de la suerte que repartió entre sus hijos y familiares. Ayer a mediodía, Reguera, todavía no estaba seguro de lo que había pasado. «Me acabo de enterar y no me lo creo. Este dinero servirá para que mis hijos terminen de pagar sus pisos y para pasar unas Navidades mejores», aseguró Miguel Ángel Suárez frente al establecimiento hostelero, al que acude cada día. 
Fue uno de los pocos que tuvo suerte ayer en Trasona. El restaurante Casa Xavina desde hace 40 años vende participaciones de un número. Ese local es muy frecuentado por vecinos y trabajadores de la factoría siderúrgica. Este año, sin embargo, adquirieron 17 series del número que finalmente salió agraciado con el tercer premio en la lotería de Navidad, aunque decidieron no hacer participaciones «por exceso de trabajo». Sólo repartieron algunos décimos entre empleados y allegados; el resto, lo devolvieron. Fue una alegría agridulce que no pudieron celebrar en demasía los empleados porque «tenían que seguir trabajando», según explicaron los camareros. 
A Reguera, por su parte, ésta no es la primera vez que sale agraciado en la lotería de Navidad. En 1960 le tocaron 100.000 pesetas, que en aquellos años era una pequeña fortuna, con las que pudo solucionar problemas familiares. «Mi hija, que estaba ingresada en el Hospital Central, falleció allí y estuvimos diez días sin poder hacer nada porque no teníamos dinero para pagar, ya que no teníamos Seguridad Social. El dinero de la lotería fue una ayuda muy grande», señaló el vecino de Villanueva. Sin duda, éstas serán sus mejores Navidades"

Xavina era además el apodo de Edelmira Martínez, natural de Ambás (Carreño), así conocida por ser Casa Xavina (tal vez una casa anterior aún a esta) de donde era oriundo su marido trasoniegu. Fue en 1949 la primera mujer conductora de autobuses de España y a su empresa, que sigue haciendo trayecto, le puso Autos Xavina. De todo ello hablábamos en nuestro periplo por el Camino Norte en El Valle, al lado de Ambás, bajando del Monte Areo hacia Tamón


Es sin duda también un momento excelente para conocer la gastronomía tradicional de esta parroquia y de los cambios acaecidos en gustos y cocinas cuando llegaron trabajadores de otros lugares de España. Esto explican en el blog de Trasona Corvera:
"En nuestro pueblo, en tiempos de escasez se comía lo que se cosechaba, berzas, lombarda, repollo, frejoles, cebollas, patatas, tomates, pimientos, arbejos, fabas de mayo, calabazón, harina de maíz, castañas, fruta, etc. 
Mataban pollos, cerdos, conejos, terneros que se guisaban con lo que se tenía en casa. 
De es cerdo se aprovechaba todo, el tocino, los jamones, la costilla, se hacían chorizos y morcillas, que se ahumaban en la casina del forno, que había en casi todas  las casas, luego se derretía la grasa, se introducía en unos pucheros de barro y en ella se metían los chorizos y las morcillas para conservarlos mejor. 
Con la leche se hacían quesos y leche presa o requesón y manteca con la que se hacían muchos platos, sustituyendo el aceite. 
En este tiempo se comían sardinas arenques a las que quitaba la piel con papel de estraza, venían en cajas redondas de madera colocadas en capas y círculo. 
Los platos que se comían en Trasona son los mismos que en todos los pueblos de Asturias, solamente había algo que era típico de la zona, según las fiestas y la temporada se cocinaba en nuestro pueblo. 
El postre era la fruta de la huerta, las manzanas que se conservaban  entre hierba en las  tenadas, se tomaban asadas en el horno, también con toda la fruta se preparaban dulces que se consumían todo el año con un poco de requesón  o cuajada. 
En el  otoño-invierno además de las nueces y avellanas están las  castañas que se comen asadas  o cocidas acompañadas de un tazón de leche caliente. 
En Trasona en cada casa había arboles frutales y  los castaños estaban en los montes de Gavitos, Villar  y Trasmonte camino de Tamón. 
Para merendar a los niños se les daba un bocadillo de tortilla o unas onzas de chocolate " La Cibeles" con pan, otro bocadillo de la época era untar el pan con mantequilla con un poco de azúcar por encima. 

El recuerdo de la merienda en casa de mi abuela, es verla hacer un chocolate con agua,  a fuego lento, dando vueltas en la chocolatera encima de la cocina de carbón; no se porque lo hacía con agua, seguro que porque le gustaba, porque tenía leche de casa. 

Mi hermana siempre se apuntaba a merendar con la abuela el chocolate  mojando un buen trozo de pan o unos bizcochos de soletilla que le regalaban a la abuela. 

Para cenar la gente mayor hacía papas o fariñas de maíz con leche caliente. Con la harina de maíz también se hacía tortos de pan y se amasaban boroñas que luego se cocían en hornos o en las brasas del llar cubiertas  con hojas de berzas o castaño,  en Trasona se rellenaban con sardinas arenques. 

Al aumentar la población de Trasona, comenzaron a abrir tiendas y dos carnicerías, la de Ángel y la de Celestina, más tarde se abrió alguna carnicería más. 

Al principio de los años sesenta, empezaron a venir por Trasona un matrimonio de pescaderos con un isocarro, luego con  furgoneta, venían cada dos días y las  vecinas de Trasona salían a comprar pescado cuando los oían pitar con un siblato y después con el claxon  desde la carretera. 

Se empezaron a comer sardinas, bocarte y chicharrín, pijotilla y  pescadillas, xarda, raya  y riñón, y para las Navidades el besugo y el pixín o rape para la sopa de pescado. 

En esa época todo el pescado que traían era fresco, recién pescado, entonces no había el mercado internacional pesquero que tenemos ahora, todo el pescado era de la rula de Avilés. 

Con la llegada de personas de otras provincias a Trasona para trabajar en la industria, se fueron mezclando las recetas de cocina y cambiando un poco los hábitos de la comida, se hizo más variada, los navarros nos enseñaron a conocer y disfrfutar de las setas, en nuestro pueblo  había muchas y muy buenas, la más preciada por ellos, la de primavera; los andaluces nos enseñaron a preparar los gazpachos, ensaladas, el sabor de las aceitunas negras y de las machadas que les mandaban sus familiares de las que ellos preparaban, los castellanos el cordero, los extremeños las migas, y así poco a poco fuimos conociendo los sabores de todas las provincias  que tenían a sus gentes trabajando en nuestro pueblo, y enriqueciendo nuestra cocina"


Y así llegamos ya al Km 17 de esta carretera AS-19, donde casi frente a Casa Xavina, estaba la carnicería de Ángel y Conchita Siguen siendo nuestros guías los blogs dedicados a Corvera y esta una de sus parroquias, como en este caso El Rincón de Trasona:
"Ángel y Conchita tenían su carnicería, los dos simpáticos, ella una candasina  siempre alegre y complaciendo en todo a sus clientes, Ángel encantador y chistoso. Los sábados, las colas salían fuera de la carnicería, pasabas allí la mañana, Ángel y Conchita vivían con sus hijos en la casa de al lado de la carnicería, los mayores se criaron en Candás con su abuela y Oliva, una persona a quien siempre quisieron como si fuese su tía. Unos años más tarde Conchita trasladó su negocio y su casa al edificio San Vicente o el Cueto, actualmente regenta el negocio su hijo pequeño Alfredo, pero no es raro ver aparecer a Conchita  por la carnicería, con nietos y biznietos. 
En los años 70, detrás de la carnicería de Conchita, Paulino, un campechano vecino de Perdones, tenía un taller de coches, de la marca Citroen. Recuerdo que algunas veces llevé mi 2 CV al taller, me parece estar viendo al dueño, con un gran mono azul, y una sonrisa en su cara y en sus ojos tras las gafas.
También detrás de la carnicería  había una fabrica de pinturas.
Aquí,  unos años más tarde Escribano, montó el taller y exposición de coches en el bajo su casa."

De la carnicería y en el mismo blog, apartado dedicado a las Mujeres en Trasona, se dice también:
"la carnicería de Ángel donde la que trabajaba todos los días sin descanso era Concita, Ángel iba a tratar el ganado, a la carnicería de la Marzaniella..., pero la que estaba siempre era Conchita"

Seguimos cruzando los accesos a Arcelor, ahora siguiendo este paso de cebra, mientras van sucediéndose linealmente los barrios de Trasona. En el tomo 3 de la Geografía de Asturias de Ayalga Ediciones, publicado en 1983 leemos lo que va a ser una constante urbana al menos hasta Piedras Blancas, en Castrillón:

"... el crecimiento demográfico de la ciudad de Avilés desborda sus exiguos límites municipales, afectando a entidades que, a pesar de estar en el área de expansión natural de aquella, figuran administradas por otros ayuntamientos. Tal es el caso de Trasona, Marzaniella, Fafilán, Cancienes y Las Vegas, en Corvera; Piedras Blancas, Raíces y Salinas, en Castrillón; Laviana en Gozón, etc."

A nuestra derecha la entrada y Recepción ArcelorMittal en Avilés, entrada continua de camiones y automóviles prácticamente a todas horas. No obstante ya no son aquellos tiempos en los que Ensidesa generaba hasta 20.000 o más empleos directos y una incalculable cifra de indirectos Marcos Palicio en su conversación con Roxelio Crespo compara la reconversión aquí vivida con la del carbón en la cuenca minera, reflejando sus coincidencias y sus divergencias:

"Puede que sea complicado, como siempre que algo se acaba y hay que volver a empezar, pero la consigna dice que a lo mejor conviene «ir olvidándose de Ensidesa y empezar a pensar en otros futuros». Hablando de reformas, Roxelio Crespo recuerda ahora sus conversaciones con el escritor mierense Nel Amaro, recientemente fallecido, y el descubrimiento de ciertos paralelismos entre esta Trasona y aquel valle de Turón de después de la mina, entre aquella reconversión minera y este amago de transformación de la vieja industria tractora en otra. «Aquí falta el apoyo económico» de la minería, aclara, «también es cierto que este trabajo no era en general tan penoso» y puede que el cambio se haya cocinado en otra escala, pero a su modo tiene algo de similar. Sin castilletes vacíos y en su lugar una fábrica que «se readaptó y no perdió demasiado espacio físico», pero en el fondo un espíritu parecido de cambio de dirección, de punto de inflexión y encrucijada, de ese momento en el que tal vez no va a quedar más remedio que decidir virar y modificar el rumbo. La gran pregunta es hacia dónde"

Estamos en El Cuetu, viendo ya la iglesia parroquial de San Vicente de Trasona, reconstruida en 1947, una década después de la destrucción de la anterior en la Guerra Civil, situada en el mismo lugar


Abierta al culto el 27 de julio de 1947, no se dio por concluida hasta 1960, cuando con el párroco don Severino Huerga se remató el ábside semicircular que alberga el altar mayor


 Y así, referido a toda Corvera, el Gran Atlas del Principado de Asturias, de Ediciones Nobel, en su tomo 5 cuando habla de concejo, nos recuerda que no en vano, aunque se decía, al mencionar la factoría, Ensidesa Avilés, como ahora se dice ArcelorMittal Avilés, la mayor parte de este complejo fabril se asentó en Corvera, cambiando drásticamente la base agraria de su economía
"La acogida de buena parte de la mano de obra industrial ha generado una explosión demográfica y una nueva organización espacial, haciendo que los pueblos de Corvera trastocasen su tipología rural por la de espacios urbanizados, siendo los mejor comunicados y más cercanos a Avilés los que mayor desarrollo han experimentado, mientras que a medida que nos desplazamos hacia el sur, el poblamiento se hace más rural y se integra en un paisaje de praderías"

Esta estructura lineal de Trasona se hizo palpable con ese recitado crecimiento poblacional a raíz de la construcción y puesta en marcha de la gran factoría siderúrgica, pero su precedente inmediato habría de buscarse en la carretera, abierta recordemos en 1882, lo cual favorecería el paso de grandes carros y carretas, así como el paso fluido de viajeros en diligencias y transportes similares, precedente del automóvil. Es más, antes aún el camín real ofrecería, si bien sin duda con sus mayores angosturas y estrecheces un paso recto y directo por este valle desde épocas muy remotas


La ubicación de una iglesia, construida sobre otra más antigua, en este lugar, delata el antiguo paso caminero de Trasona. Aparece mencionada como San Vicente de Aramaubes en un documento fechado en el año 857, como donación de Ordoño I a la mitra catedralicia ovetense, que aunque falsificación interpolada por el obispo Pelayo en el siglo XII, delata la existencia de un antiquísimo santuario en un camino, lo que podría llevar a elucubrar con la cristianización de un lugar sagrado ancestral dedicado a deidades viales, como tantas veces hemos visto a lo largo de este y otros itinerarios antiguos


Y lo mismo que antes había paradas de postas ahora hay gasolineras, como aquí en El Cuetu, donde Guillermo López de Ca Xuan, en terrenos de su casería, hizo una cuando ya pululaban por Trasona muchos coches y camiones, llamada primeramente LOYGAR, que luego vendió a Egocheaga, junto con la casa, actualmente en ruinas, mudándose a Gijón/Xixón con su familia


Enfrente de la gasolinera hay un edificio de viviendas, que fue construido por Fructuoso Ca la Chapa y su familia al ser expropiados de La Marzaniella para hacer el barrio obrero de El Pobladín


Al fondo y pegada a ella hicieron también una tienda-chigre, donde "vendían de todo", hasta pienso para los muchos animales domésticos que aún había en Trasona:
" simpático y socarrón tenía la tienda siempre llena, ayudado por su mujer y su hija Cuca"

Fructuoso tenía además una granja donde criaba pollos y cerdos, así como colmenas, comercializando su miel. Más tarde el negocio se dividió entre sus hijos, Cuca se quedó con la tienda, ayudada por su madre, y Gelo con el bar, que sigue despachando. Enfrente hay una explanada de aparcamientos y terraza


Aunque con su gran linealidad ya se ha dicho que no hay un "centro urbano" propiamente dicho, el entorno de la iglesia siempre solía ser secularmente de gran trasiego. No olvidemos que la parroquial era secularmente el centro de reunión vecinal de todos los barrios de la parroquia y se dirimían, aprovechando la misa, asuntos del común, haciendo las veces de centro social laico además de lugar sagrado, algo que, en siglos pasados, disgustaba a algún obispo reformador de antiguas tradiciones


A la izquierda el Café-bar Atenea, célebre por sus pinchos, bocadillos, desayunos... allí estuvo también la tienda de electrodomésticos de Antonio y Susa, hacia 1970. Al lado fue la escuela de niñas, una de cuyas primeras maestras era Doña Belarmina, a la que siguió Doña Pilar, relegada tras la Guerra Civil pero que siguió viviendo en Trasona. Su hijo Manolo Cortina realizaba películas con las excursiones del catecismo


Seguidamente estuvieron dando clase Doña Pilar Rodríguez, Doña Matilde Iglesias y Doña Isabel González Alvagés. Damos paso al artículo Aquellos maestros de Trasona:
"Una maestra que duró muchos años en Trasona fue Dña. Ángeles Ocejo Siero, era muy buena maestra,  pero tenía muchos niños a su cargo llegando a tener que hacer dos turnos mañana y tarde,  estuvo en los años  cuarenta-cincuenta

Dña. Ángeles marchó para Villalegre y en su lugar quedó Dña. Celestina,  que permutó  su puesto con Dña. Olvido . En esa época al principio de los años 60, en las escuelas se repartía el desayuno a los niños que era mantequilla y leche, era la ayuda americana"

La escuela de niñas se Trasladó después a Gudín, de cuyas maestras ya hemos hablado...


Y esta es la historia de las escuelas de El Cuetu en trasonacorvera.comHistoria de Trasona:
"Mientras tanto las niñas acudían a una escuela donde además de aprender a leer y escribir aprendían a coser, y al llegar a casa tenían que cuidar de los hermanos pequeños y hacer las tareas de la casa.

Entre las maestras de las niñas de aquella época o un poco más tarde antes de la guerra, tenemos que recordar a Dña. Pilar ( madre de Cortina, el famoso Cortina que perpetuo las imágenes de los niños y personas de Trasona en las películas que hizo en los años 60).

Dña. Pilar trató de enseñar a sus alumnas todos sus conocimientos, pero fue destituida de su puesto por motivos políticos"

Nuevos contrastes en el camino de la iglesia: a la derecha una verja cierra una quinta ajardinada y a continuación se yerguen unos edificios de pisos


Ye es que en El Cuetu se conservan ejemplos de lo que fue una zona residencial burguesa anterior a la construcción de Ensidesa, cuando varios indianos retornados con fortuna construyeron sus mansiones en su solar de nacimiento. Esto era muy habitual en los caminos principales y extrarradios de las ciudades, como aquí sería por entonces Avilés y sus arrabales de acceso 


Con el tiempo algunas de esas quintas y sus terrenos fueron ocupándose: a continuación vemos el citado bloque de pisos, es el Edificio San Vicente, construido a finales de la década de 1960


En sus bajos se instaló la carnicería de Conchita tras venir aquí desde su antigua ubicación cerca de Casa Xavina. Más adelante y cerca de la iglesia unas palmeras delatan más antiguas quintas de indianos de las que pronto hablaremos


Por aquí estaríamos entrando en otro de los barrios de Trasona, San Pelayo, llamado así por una capilla que encontramos después de pasar la iglesia


Placa con el nombre del barrio


Al pasar vemos todo el contorno de los bloques del Edificio San Vicente. En sus bajos estuvo también el almacén de Cuétara de González y Cía, patrocinadores del famoso Club de Piragüas Galletas Cuétara, sobre el anterior de Virgen de las Mareas, un hito de este deporte en Asturias, cuya historia arrancaría con esta denominación el 1 de julio de 1965, según escribe en La Voz de Avilés el 13-2-2021 en El Club de la Cofradía de Pescadores:
"La Cofradía Pescadores les anunció el cese del patrocinio por lo que se hizo necesaria la búsqueda de recursos. Estos llegaron merced al contacto de Fran Llorente -todo un experimentado en los deportes náuticos al proceder del banco fijo y trainera, y vicepresidente de la Federación Asturiana que dirigía Eduardo Cuervo-, que gracias a sus buenos contactos en la firma comercial avilesina González y Compañía se consiguió el patrocinio de una conocida marca comercial, con lo que su nueva denominación pasaba a ser Club Piraguas Galletas Cuétara.

Nueva indumentaria roja y cambio de instalaciones a los almacenes Balsera -concretamente ocupando la zona reservada a servicios de la citada entidad- ya que la Cofradía les puso de manifiesto la obligación de trasladar sus piraguas desde la Rula. Mantuvo su actividad hasta 1970, cuando ya las aguas de la ría eran poco practicables dada su contaminación y se producía el cambio al embalse de Trasona. A ello hubo que sumar el resurgir de la sección de piragüismo del Club de Mar, a la que se fue Maribona junto con un nutrido grupo de jóvenes desde 1965, mientras que los veteranos se fueron integrando en la Atlética, Ensidesa y Los Cuervos de Pravia"

Como advertimos, las palmeras delatan el solar de otra quinta de indianos de Trasona, que en pleno verano y coincidiendo con las fiestas recuperadas de San Pelayo, son protagonistas de una feria en la que se viste a su moda, de blanco y sombrero de paja. Una muestra de esta fiesta es el artículo de J.F. Galán en El Comercio el 29 de julio de 2019: Trasona rememora su pasado indiano:
"Trasona rindió ayer por sexto año consecutivo su particular homenaje los indianos, una comida popular en memoria de aquellas gentes que a finales del siglo XIX y principios del XX hicieron las Américas en busca de un futuro mejor. Los pocos que hicieron fortuna regresaban años después para disfrutar en su tierra del buen dinero hecho al otro lado del Atlántico, de vacaciones o para buscar novia, casi siempre coincidiendo con las fiestas sacramentales de la localidad. Se les conocía como indianos.
La comida reunió a setecientos 'indianos' debidamente ataviados con trajes de época, ligeras, elegantes y frescas prendas de color blanco o beis y sombreros de paja de ala ancha, como los que imponía la moda de entonces. Entre ellos se encontraba el arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz Montes, que presidió la oración en la capilla del santo, la procesión con su imagen hasta la iglesia parroquial y la misa sacramental. «Recordar a los ancestros y mantener vivas las tradiciones y la gratitud a los antepasados es algo bonito», señaló antes de disfrutar como uno más, tocado con un sombrero blanco que contrastaba con el negro de su sotana, de la comida. 
Le acompañaba Constantino Bada, párroco de Trasona desde el pasado septiembre y artífice de la recuperación, este año, de los actos religiosos de San Pelayo. Guía arqueológico en rutas bíblicas, le gusta la historia «y compartirla con el pueblo», y tiene aires indianos. «Soy tataranieto por amores ilegítimos del conde de Peñalver, Nicolás Zamora. Nació en Puerto Príncipe, actual Camaguey (Cuba), y vino a España al servicio de la reina Isabel II». 
No faltaron a la comida Loli y Rosa, impulsoras del movimiento vecinal y del blog del que acabaría surgiendo la comida de indianos de Trasona. Uno de los frutos de su iniciativa es un carrito de bebé de época construido a partir de una fotografía de 1910. «La parte de arriba la hicimos nosotras y la de abajo el presidente de la comisión de festejos», Bernardo Duarte. Fue un regalo para Víctor Rodríguez, hijo de María Rodríguez y Javier Menéndez, que dado el paso del tiempo ya tiene que encogerse para hacerse un sitio. Le reemplaza un muñeco, lógicamente también con ropajes de principios del siglo pasado"

Es este otro de los elementos recogidos en el Catálogo Urbanístico de Corvera, de cuya ficha descriptiva extraemos lo siguiente:
"Esta casa responde a uno de los modelos que gozaron de mayor popularidad entre el colectivo indiano, el de villa ya fuese urbana o rural. Son numerosos los ejemplos en Asturias de estas villas que pueden aparecer integradas en la trama urbana de una ciudad, en los ensanches de los núcleos urbanos o en las cercanías de las cabeceras de los concejos"

Esta ficha urbanística plasma asimismo una explicación de sus trazas constructivas: 
"Edificio de planta rectangular dividido en planta baja, piso y bajocubierta con cubierta a dos aguas. Como es habitual, la fachada principal es la que presenta mayor interés compositivo. La fachada se organiza de forma simétrica con el mismo número de vanos en las dos alturas, así, en la planta baja la puerta central se flanquea por una ventana vertical a cada lado mientras que el piso superior abre tres balcones empotrados en correspondencia con los huecos inferiores. Sobre el balcón central, y potenciando la verticalidad de la fachada se abre un volumen abuhardillado (que facilita la habitabilidad del bajocubierta) con un balcón empotrado y cubierta a tres aguas. Todos los vanos, de piedra, tienen un arco rebajado y se decoran con un recercado de sillar que se utiliza también como moldura de piso y en los esquinales. La entrada está precedida por una terraza con barandilla de hierro"

Y ya estamos ante la moderna iglesia parroquial de San Vicente con su pasarela, dado que, como se suele decir, "alguien se empeñó en pasar la autopista entre la iglesia y el cementerio y hubo que ponerla". Aquí llega además el antiguo camino señalizado desde Casa Generosa y los edificios de El Pedréu o El Pedrero


Como hemos dicho, iglesia y rectoral son construidas tras las destrucciones de la contienda civil en el lugar de la anterior, de la que únicamente se conserva un viejo pináculo herreriano en la actual escalera de acceso. Además de las discutidas menciones pelagianas del Liber Testamentorum con aquella lejana fecha del año 857, aparece citada en el famoso inventario parroquial de Gutierre de Toledo de 1385-86 como "San Viçente de Trasona" dentro del "Arçiprestalgo de Goçón"


Es de planta de cruz latina y destaca por su mencionado ábside semicircular, que arranca en recto y que, como buena parte del conjunto, revela un gusto por el arte románico (su bóveda interior es de las llamadas de medio horno). También por sus  dos sacristías (una a cada lado del presbiterio) y el gran campanario


A pesar de las destrucciones bélicas se conservan documentos como el primer libor de bautizados, casados y difuntos, que es del año 1620, y los tres libros de fábrica correspondientes a los años 1712, 1801 y 1870. También están los libros de sus cofradías, como el de la de San Antonio Abad de 1634 y el del de la del Carmen de 1733 y 1850, mas un libro de cuentas de las limosnas de San Pelayo Mártir, patrón del barrio


Adosada al presbiterio y una de las sacristías está al exterior la casa rectoral, a la izquierda de la foto, con portada de arco de medio punto (que no vemos desde aquí) y ventanas adinteladas


Según tenemos la iglesia a la izquierda vamos observándola, mientras nos acercamos al cruce con el camino a la estación, que está a nuestra derecha, regulado por semáforos


En la calle de la estación estaba el Bar Cercanías, de Ángel (antes de su madre) y Maruja (que tuvo también una mercería en el barrio), bar con el que luego siguió su hijo

Más antiguamente hubo un salón de baile llamado La Flor del Bosque, "donde todos los domingos acudían las mozas y los mozos a bailar y a cortejar".

"Se acudía a las romerías de los pueblos cercanos, bailaban al son de la gaita y el tambor casi siempre en verano, siempre cuando se terminara la hierba,(recoger la hierba seca y hacer bálagos con ella en el prado para cuando se pueda bajar a la tenada) y se dejara atendido el ganado, allí se conocían los jóvenes y luego ellos acudían a casa de ellas a cortejar en la quintana de las caserías, siempre supervisados por los padres de ella"

(Leer más: https://www.trasonacorvera.com.es/historia/)

La estación, abierta como este tramo de vía en 1922, fue vuelta a hacer cuando se instaló Ensidesa, pues se necesitó también variar el trazado ferroviario. La vieja estación, bellamente rodeada de altos árboles, fue derribada y construida otra, más cerca de la iglesia, modificando el trazado ferroviario de El Carreño

En un antiguo almacén se habilitó La Cantina, donde según unas fuentes estuvo siempre atendido por mujeres y según otra por una pareja de candasinos, al menos durante años

"En este tiempo en nuestro pueblo se hacían muy buenas fiestas, teníamos carrozas que salían con la reina y sus damas de honor, las carrozas las hacía Isidro, un personaje muy popular y emprendedor de aquella época. Había romerías y partido de futbol de solteros contra casados. Se empezó también en los años sesenta la gira al pantano del día 1 de Mayo para celebrar la fiesta del trabajo, venía gente de toda la comarca"

En nuestros días el antiguamente intenso trasiego de gentes al tren ha desaparecido y con él aquellos antiguos chigres y bailes, tan usuales antaño en todas las estaciones por la afluencia de viajeros y que marcaron toda una época


Según avanzamos vemos a la izquierda nuevos detalles de la iglesia, como el porche, pórtico o cabildo de su parte norte


La nave de cuatro tramos y el crucero de tres cuerpos. Su cubierta es de bóveda de medio cañón en la nave y en los tramos centrales del crucero; de bóvedas de arista en los tramos laterales o capillas de crucero en el presbiterio


El porche se extiende por su cara oeste, bajo la torre del campanario, y continúa hacia la del sur, que mira a la autopista, esta con sus problemas de ruidos, para la que se plantean medias acústicas, reemplazar el pavimento de hormigón armado y la reducción de la velocidad en este ramo


Delante de la portada oeste de la iglesia se extiende una arboleda a manera de paseo, hasta la misma capilla de San Pelayo, la cual vemos ya desde aquí, desde el cruce de la estación, que dejamos a nuestra izquierda para seguir de frente y siempre recto por la carretera AS-19, donde había, a mano izquierda, algunas casas entre la iglesia y la capilla que desaparecieron al hacerse la autopista, como el bar tienda de Pepe Ca Cándido y Covadonga del Molín, donde los niños compraban el bollo para el bocadillo para ir a la escuela


También estaba la tienda de Casa Morán, con Engracia Ca la Pepa (Engracia Rubín) y su marido, de frutería y ultramarinos, con la que siguieron más tarde Flori y Oscar


Casa Morán se mantuvo aquí hasta que, con la citada autopista, trasladaron el negocio a los bajos del Edificio San Pelayo, construido unos metros más allá y a la derecha, mirando a la capilla, en la que fue otra quinta indiana


Ese Edificio San Pelayo, como el Edificio San Vicente, se extiende entre la carretera y el ferrocarril, abriendo en sus bajos algunos negociaos a partir de los años de 1970


Esta zona entre El Cuetu y San Pelayo, con las escuelas, la iglesia, la capilla, quintas indianas y residenciales y varias tiendas y bares, vino a ser considerado el corazón de Trasona. En él tenía su casería y corripia de gochos o pocilga donde criaba cerdos Blas, El Lecheru Trasona, que recogía la leche de las caserías y la repartía por las casas de Trasona y Llaranes


Esta es una  vista de la iglesia desde las escaleras laterales que suben desde la carretera. Antes hemos hablado del uso como centro social de algunos templos, para actividades no estrictamente religiosas, como reuniones y asambleas vecinales, desde tiempos inmemoriales, A ello quiso oponerse el famoso y enérgico obispo Agustín González Pisador con sus célebres Constituciones Sinodales del año 1760, tal vez no con mucho éxito. En el caso concreto de esta de Trasona, en 2019 los vecinos aún se quejaban por ello, al enterarse que su interior había sido escenario de filmación para algunas películas, sin autorización. Así lo recogía Illán García para La Nueva España
"El anterior párroco de Trasona, José Santaclara, usó la iglesia como escenario para grabar, al menos, una película. Lo hizo "sin autorización" de las autoridades religiosas. "Intuíamos que estaba involucrado en el mundo del doblaje y del cine, pero no sabíamos nada de que había utilizado un lugar sacro para una grabación", señaló ayer el arcipreste de Avilés, Vicente Pañeda, que es párroco de Pillarno, San Miguel de Quiloño, San Martín de Laspra y Piedras Blancas.
Esos filmes fueron grabados antes de que Santaclara dejara de oficiar misa en Trasona, es decir, antes del pasado mes de septiembre de 2018 (...) 
Los feligreses de San Vicente de Trasona se enteraron de que el templo era utilizado para la grabación de películas después, cuando Santaclara ya no estaba en el concejo de Corvera. Y critican con dureza esa acción porque consideran que el templo es un lugar sagrado que ha de utilizarse para cuestiones estrictamente relacionadas con la fe, como el rezo y las misas, además de los casamientos, bautizos y comuniones. "Es un lugar para el recogimiento, para el rezo y como tal ha de respetarse", aseveran los vecinos críticos con la gestión de Santaclara (...) 
La afición por el mundo del cine del anterior párroco de Trasona no es nueva. Ha participado en diversas películas como actor de doblaje al asturiano. Es más, puso la voz de Michael Caine en uno de esos filmes emitidos por la televisión pública regional. En 2016, comentó en declaraciones a este periódico su pasión por el doblaje: "Me apasiona, es un proceso de formación personal que no es incompatible con otras, y me sirve para incorporar algunos recursos al púlpito". Como actor, también ha participado en algún filme..."

Mirando a la iglesia estaba la tienda de Ana, "una mujer alta y rubia, peinada con el pelo recogido en un moño, con gafas y con una sonrisa en los labios". Era el Spar, la famosa cadena de tiendas minoristas, de Trasona: "la recuerdo siempre por las exquisitas galletas de barquillo rellenas de nata que vendían al peso, estaban buenísimas". Ana se mudó a Avilés cuando sus hijos crecieron, luego lo llevó Isabel con su marido Lulo
 

Al lado era Ca Reverte, hermosa casa de corredor, que tenía fragua anexa. En la fragua se instaló después la droguería de Antonio Fernández. Luego se asoció con Susa, pasando a llamarse de Fernández y Montiel, allá por 1960. Más adelante pondrían la tienda de electrodomésticos de la que hablábamos antes


En el varias veces citado 
Catálogo Urbanístico de Corvera leemos de esta casa lo siguiente:
"La casa con corredor entre muros cortafuegos es un modelo frecuente en la arquitectura popular asturiana, conservándose en Corvera interesantes ejemplos. Sin embargo, en la gran mayoría de los casos de los que nos encontramos en Corvera estaríamos ante un modelo que responde a una evolución de la casa mariñana, primero hacia un piso añadido sobre el portal con un pequeño balcón, y, luego a una ampliación del corredor a todo el espacio entre muros. En otros casos puede deberse a la importación hacia el ámbito rural de modelos nacidos en el espacio urbano (muros gruesos medianeros entre las casas para evitar los incendios), si bien estos son los casos menos frecuentes en nuestro concejo. La mayoría de estas casas corresponden al período que va desde la segunda mitad del siglo XVIII hasta los años finales del siglo XX, definiendo en esta horquilla la propia evolución de la casa, desde una mariñana a una de corredor. El edificio tiene planta rectangular dividida en planta baja, piso y bajocubierta con cubierta a dos aguas. El aspecto exterior difiere de lo que se considera habitualmente como una casa tradicional, pero pese a las intervenciones en el revestimiento de la fachada conserva la estrcutura habitual de muchas viviendas populares que ya hemos visto en el concejo. En la planta baja, la fachada principal cuenta con un portal abierto cobijado entre los muros cortafuegos sobre el que se dispone el corredor de madera. En este piso superior se practican dos vanos adintelados que flanquean la puerta, igual que en el piso inferior con una ventana a cada lado de la puerta principal adintelada"

Más atrás las palmeras siguen delatando lo que fue una quinta indiana, aunque no se conserve, la que había donde ahora está el Edificio San Pelayo, espléndida mansión mandada construir por Dolores e Higinio, . Dolores era de los de El Monxo de Trasona, y como sus hermanos, emigró a Cuba tras casarse con Higinio, vecino de Llaranes. Tuvieron una hija, Marina, y un hijo, que murió de niño. A su regreso a Trasona construyeron esta casa, por entonces en el centro del pueblo y con la vega del río a sus espaldas, donde luego se asentaría Ensidesa


Marina se casó en la cercana capilla de San Pelayo el día 3 de marzo de 1930 a la temprana hora de las 9 de la mañana. Su marido era hijo de otro indiano, este a Argentina, y vivía en Navia, a donde se marchó a vivir, a otra casa indiana, donde tuvo varios hijos, los cuales hicieron la primera comunión en la capilla del colegio del Sagrado Corazón de Trasona, el fundado por la viuda del conde


Durante unas fiestas de San Pelayo, cuando Marina y sus hijos pequeños vinieron a celebrarlas, estalló la Guerra Civil, quedando mucho tiempo separada de su marido pues Navia cayó pronto en manos nacionales. Más tarde llegó el reencuentro y tuvieron más hijos, que venían a pasar temporadas a casa de sus abuelos en Trasona


Cuando el párroco D. Severino Huerga vino a Trasona pasó a residir un tiempo en esta casa, donde conoció a Laudelina, que trabajaba en esta casa desde hacía trece años y pasaría a trabajar con él cuando hicieron junto a la iglesia una nueva casa rectoral


Dolores, la fundadora, se hizo mayor y quedó viuda, por lo que Marina le pidió a su primo Isidro'l Monxo que viniese a vivir aquí para que su madre no estuviese sola. Con Isidro, que trabajaba en Ensidesa, vinieron su mujer Florina y sus hijos Isidrín y Rosa Mary, arregló y embelleció los jardines, cuidando los frutales. En los jardines colaboraba en las fiestas de San Pelayo pues era donde se construían carrozas para el desfile, ya cuando Ensidesa era una realidad en el valle. Además hacía cuantos arreglos se necesitasen en la mansión. En el sótano las hermanas Socorro y Sara, hijas del sacristán, daban clase de baile asturiano a las niñas, mientras Aida y Berta de Ca Marcelo, catequistas, ensayaban obras de teatro que luego se representaban en el Cine Peñalver o en el Centro Cultural de Trasona


Dolores murió e Isidro y Florina se fueron más tarde a vivir al Poblado de Llaranes, Sus herederos de vendieron la casa con la finca, la quinta fue derruida y se construyeron estos pisos. De aquel antiguo esplendor solamente quedan las citadas palmeras y la verja. Aquí a este Edificio San Pelayo decíamos vinieron a vivir Flori y Oscar cuando se tiró Casa Morán. Residían en uno de los pisos mientras en un bajo reabrían su tienda, con ellos estaba su hija Olga


Fuente y farola ante la capilla de San Pelayo, que da nombre al barrio, santuario del siglo XVII dentro de la sobriedad barroca pero con toda la elegancia de este estilo. Tuvo algunos añadidos dieciochescos y sufrió quema en la guerra civil, tras la que fue restaurada, eliminándose un pequeño atrio o tejadillo y dejándosela a piedra vista. La imagen del patrón también fue quemada y de ella parece ser aún se conservaba, chamuscada, una mano. Se reabrió al culto el domingo 17 de mayo de 1942

 
La fuente, que había dejado de manar, también fue restaurada, esta en el año 2018, respetando su forma original con una antigua farola arriba. A los lados hay unos canapés de piedra donde se sentaría la genta que venía a por agua y también los viajeros de la carretera y más antiguamente del camín real. El 15-7 de 2017, al dar cuenta del proyecto de rehabilitación, Marta Bernardo explica sus características en La Nueva España:
"La fuente consta de un pozo de construcción cuadrangular en dos alturas con caño al pie, rematada con un monolito y flanqueada por dos bancadas de cemento y ladrillo. Los propios vecinos destacan que tras su construcción, la fuente se convirtió en lugar de reunión habitual, especialmente de las personas que acudían a la capilla de San Pelayo, ubicada a escasos metros; se trata de un manantial que siempre fue muy utilizado también por los peregrinos que hacen el Camino de Santiago"

La capilla estaba cerrada todo el año y solamente se abría el día de la fiesta. Antes Sara la del Sacristán venía a limpiarla y encerar el altar, que procedía de la iglesia parroquial al desaparecer el original en la guerra. Acudían aquí, antes de la guerra, muchos peregrinos, principalmente de los pueblos de los alrededores, a pedir a San Pelayo conservar el sentido del oído. Para ello la costumbre consistía, según leemos en El Rincón de Trasona, en tocar con las orejas la palma que portaba la imagen del santo:
"... una señora de Avilés muy querida que ahora tendría más de cien años, me contaba como su madre y su tía la traían cuando era niña  en el tren a visitar al Santo y a pasar la palma por los oídos. Maximina Granda,  siempre cuenta como su abuelo siempre les pasaba la palma el día de San Pelayo"

De unos años a esta parte el santuario es famoso por instalarse durante las navidades un magnífico y enorme belén cuyos elementos se basan en la arquitectura de las casas y lugares de Trasona, incluyendo esta misma capilla. No olvidemos también aquí de plasmar la ficha correspondiente del Catálogo Urbanístico de Corvera:
"Situada en las cercanías de la iglesia parroquial de Trasona, esta capilla se erige en el siglo XVII y se realizan algunas intervenciones en el siglo XVIII consistentes básicamente en añadidos de elementos decorativos. La capilla tiene una pequeña planta rectangular de una nave con dos tramos y testero recto. La cubierta de la nave se ejecuta con dos bóvedas de arista separadas por un arco fajón de medio punto que apoya sobre dos ménsulas, siendo la del ábside de crucería. En la fachada principal, la puerta de acceso es adintelada y está decorada con una moldura de orejas al estilo barroco. Llama la atención el remate de la fachada que, en opinión de González Calle, fue añadido con posterioridad a la construcción - S. XVIII - de la iglesia (posiblemente sustituyendo a una espadaña), que consiste en una cornisa ondulante con volutas en los extremos y una cruz en el centro como remate del imafronte. En el exterior, a modo de atrio se disponen cuatro postes de metal unidos con cadenas que delimitan el espacio inmediato a la puerta de acceso"



Detrás de la nave veremos el ábside. En El Camino de Santiago por Asturias. Topoguía 2. Ruta de la Costa, coordinado por la catedrática de Historia María Josefa Sanz podemos leer:
"Al entrar en Trasona, saludaba a los jacobitas la capilla de San Pelayo, santuario de gran devoción local; era entonces Trasona, localidad que sería donada a la mitra ovetense por la reina Velasquita en 1006, una feligresía agrícola y rural cuya fisonomía nada tenía que ver con el aspecto moderno e industrial que presenta en la actualidad al viajero"

A la derecha de la carretera estaba el Bar Blanco, que atendían Pepe y su mujer Otilia. Pepe ya había sido barbero en un local al lado del viejo bar, que era más pequeño y tenía un corredor mirando a la calle, pero con la gran afluencia de gentes con el boom de Ensidesa lo ampliaron e hicieron además habitaciones para pensión. Su hija era Mari Lis, una de las más activas jóvenes de la vida cultural de Trasona en la década de 1960. Otro familiar célebre en el Bar Blanco era Ángeles Ca Irena. Estos son sus años de nacimiento y esplendor, contados en El Rincón de Trasona:
"la primera casa con corredor era propiedad de la familia de Pepe y su mujer Otilia, aquí nació su hija Marilís. La casa estaba situada entre la gran finca con la casa de indianos por la derecha (hoy ubicado el edificio de San Pelayo) y a su izquierda, separados por el camino que subía a Villar, estaba "Casa María San Pelayo", que era una tienda de ultramarinos y estanco.

Con la llegada de ENSIDESA, en los bajos de la casa de Ca Irene construyeron un bar, contribuyendo a que San Pelayo fuese el centro de actividad del pueblo. Estaba la iglesia, la tienda-estanco, el barbero y el bar, que más se podía pedir para considerarlo el centro de un pueblo disgregado a lo largo de la carretera que unía Avilés con Gijón y se extendía hasta Los Campos.

El bar estaba regentado por Pepe y su mujer, ayudados por la madre de ésta, María Irene, un personaje popular y casi siempre estaba la hermana de Otilia, Angelinos.

Según nos cuenta Marilís, su madre vio que era necesario dar alojamiento a todos aquellos obreros que llegaban a Trasona para construir y trabajar en la nueva empresa, así que cambiaron totalmente la estructura del edificio, subiendo alturas y construyeron una pensión en los pisos y el bar en el bajo.

Pepe y Otilia, ante el ajetreo del bar y posaderos, decidieron llevar interna a su hija al Colegio Santo Angel de Avilés.

En el bar se colocó un gran futbolín que hacía las delicias de los jovencitos de Trasona, por el verano se sacaba a la terraza. En aquellos años toda ayuda venía bien. Marilís, también echaba una mano siempre que podía, hasta que se casó en 1967 e incluso después también acudía con su marido Viso para ayudar cuando se necesitaba.
A la izquierda del bar colocaron el juego de la llave, que concentraba muchos adeptos, esto además del futbolín y los retos de ciclismo, hicieron este bar un lugar de encuentro para vecinos y foráneos   durante muchos años. Estos tiempos fueron de gran bullicio para el bar Blanco y para todos los bares de Trasona, en los años sesenta y setenta en Trasona había muchos y todos estaban llenos"

Tras la marcha de Pepe y Otilia el Bar Blanco fue alquilado por Manolo y Alvarina, que se asentaron aquí con sus hijos Olga y Manolito. En la barbería, tras Pepe, Francisco hizo de barbero:
" Al cabo de unos años, sobre 1972,  Pepe y Otilia dejaron el bar, pero no llegó a estar cerrado ningún día, en el momento que ellos lo dejaron comenzaron a atenderlo  Manolo y Alvarina, un matrimonio de un pueblo cercano a Tineo que ya regentaban un bar en Villalegre desde hacía unos años, tenían dos hijos: Olga y Manolito.

El bar iba bien, Alvarina era una persona carismática y encantadora que trataba a todo el mundo con cariño, llenando el bar de clientes. Fueron unos años de mucha felicidad para la familia, muy querida por todo el pueblo.

Olga se Casó con Camuel, el hijo de Ángel el carnicero y Conchita, era una pareja perfecta, aquel fue un día muy feliz para las dos familias y para todos los invitados que acudimos a la boda.Tuvieron dos hijos, Dani y Javier

Durante unos años Alvarina y su familia,  por su yerno Camuel, acogieron en su casa a muchos futbolistas que acudían de fuera de Asturias para jugar en el ENSIDESA u otros equipos, todos estaban encantados del trato familiar que les dispensaban. Nos lo ha recordado Ana, la hija de Celestina y Paco de la carnicería  "el Gozón", su marido fue uno de aquellos futbolistas que recibieron la buena acogida y de los que se quedaron en Asturias.

Pero todo se fue al traste con la muerte de Alvarina y su hija Olga en accidente de coche el mes de agosto de 1983. Esto significó el fin  de la familia y el comienzo del declive del negocio, Manolo y su hijo siguieron con el bar un poco de tiempo, pero ya nada era igual.
Después  Manolito y su mujer se hicieron cargo del local,  tuvieron tres hijos, cuando ellos lo dejaron, el bar quedó cerrado. 
El edificio fue comprado hace unos años y se mantuvo cerrado, con la llegada de la crisis inmobiliaria  no se construyó nada en este lugar y el edificio se fue deteriorando amenazando derrumbe.

 Hace algo más de un mes fue derribado, su dueño lo ha cedido durante un tiempo al Ayuntamiento de Corvera para que se pueda realizar el aparcamiento"

También tenemos que recordar al estanco y tienda de San Pelayo, regentado por María Ca Antón (María García), que llevarían posteriormente sus hijas:
"En el estanco recordamos a Mª Antonia y Aminta, ayudadas por su tía Feliciana, que había sido guarda barreras, además de su hermana Mª Ángeles. Aminta y María Antonia fueron unas personas muy queridas en Trasona. Cuando eramos niños y acudíamos a comprar a su tienda, siempre te regalaban, con la mejor de sus sonrisas, unos caramelos que sacaban de aquellos tarros de cristal. Las dos hermanas eran solteras y sentían  un cariño muy especial por su sobrina Mª Jesús, sobre todo Aminta que pasó los últimos años de su vida cuidada y mimada por ella" 
(El Rincón de Trasona)

Al lado del estanco un camino comunicaba con El Llagar de Villar, de los hermanos José y Manolo, donde corría la buena sidra y se organizaban grandes y sonadas espichas, que duraban hasta tres días, tristemente desparecido con Ensidesa


A la izquierda, detrás de la capilla, el Restaurante San Pelayo se dice fue primeramente una churrería y pastelería, la cual compraron Lola y su marido Venancio, a la que pusieron El Gallego y cambiaron su filosofía, sirviendo también comidas y ampliando y reformando el local. Era hacia 1970 y Lola llevaba el peso, estando además al cargo de la cocina, pues el marido trabajaba en una empresa. Ahí estuvo también la barbería de El Frasco, Nos agrada compartir esta crítica gastronómica de En busca del restaurante perfecto:
"Especializado en carnes a la parrilla y citar las tapas abundantes, todo un lugar como los de toda la vida donde nunca te quedarás con hambre. 
Empezamos la degustación de los platos con un pulpo a la gallega. Entre las ganas que tenía de pulpo y he de decir que estaba en su punto totalmente, nada duro, no me arrepiento de la elección, todo un plato típico de las cenas de «tapeo» que no te dejará mal sabor de boca, sino todo lo contrario. 
Para continuar elegimos un queso provolone a la parrilla. Si eres un amante de los quesos como yo no dejes de pedirlo, te encantará. Se nota que la parrilla es su especialidad. 
Tras acabar con la cena no nos quedaba ya más espacio para los postres, pero recordar que tiene un gran surtido de postres caseros.  
Recordaros que son especialistas en parrilla y en uno de los momentos de visitar al servicio pase por delante de la parrilla y vi en ella sus carnes cocinándose lentamente y si os gusta la carne tanto como a mi…. Muy buena pinta y mejor olor aun así que como dicen por ahí… «Lo que bien huele mejor sabrá» 
En el momento de postres y cafés nos obsequiaron con unos bombones helados, un detalle que hace ver que el servicio está atento en todo momento al cliente y que te hacen sentir como en casa. 
Decir que tras esta experiencia gastronómica tengo que compartir con vosotros que no hace falta ir a lugares lujosos donde pagas no por la comida, sino por el nombre. Existen restaurantes de los de toda la vida muy cerca y no los conocemos apenas, y de verdad que es donde mejor se come y por poco dinero. Recomendaros este restaurante-parrilla porque saldréis encantados y se sitúa a pocos km. de Avilés, no hay excusa! Calidad y precio al alcance de todos"

Detrás, otro célebre chigre, el Bar Ávila, uno de los más antiguos de Trasona. El primer establecimiento lo fundó la familia Cardina, no sabemos la fecha exacta pero sería poco después de 1900, siendo comprado poco más tarde por el indiano Modesto González, emigrante en Cuba, casado con Emilia de Ca Lolo, de numerosa descendencia, pues cuando compraron el chigre tenía cuatro hijos, y seis más vendrían después, naciendo en el bar, según noticia cómo no, del magnífico blog El Rincón de Trasona:
"En el año 1926, sus hijos mayores emigraron a Cuba, y desde allí mandaban el café puro, sin tostar, y las hijas de Modesto y Emilia lo tostaba en unas sartenes muy grandes especiales para eso, su café tenía fama de estar exquisito recién tostado. 
Era un lugar de partidas de brisca y pintas donde todo el mundo se conocía y eran como familia. 
En 1941, fallecía Modesto y su familia abandonaba el bar poco más tarde, para instalarse en una casa con todas las comodidades construida con la ayuda del dinero mandado por sus hijos desde Cuba.  
Desde entonces Casa Cardina, que era el nombre que mantenía el bar, fue alquilado por la familia de Juan y Regina, muy populares en nuestro pueblo, tanto ellos como sus hijos Yolanda y Juanín. Regina también era muy buena tejedora. Al final de los sesenta  se fueron para Madrid"

Tras la marcha de los arrendatarios, la familia de Modesto, los propietarios, vendieron el establecimiento a un matrimonio de Ávila, Manuel Rodríguez, que venía a trabajar a Ensidesa, y su mujer Felisa, que llegaría después con su hijo pequeño, Jorge, teniendo aquí su casa y negocio. Es entonces cuando pasó a llamarse bar Ávila
"Cambiaron el nombre, pasó a llamarse Bar Ávila y el estilo del bar , de ser un chigre donde se ponían pintas de vino y se jugaban a las cartas, se transformo en un bar donde se hacían exquisitos platos preparados por Felisa. 
Los vecinos de Trasona y todos los que trabajaban en nuestro pueblo pasaban a degustar el cochinillo asado al modo castellano y los platos contundentes  que preparaba su propietaria tanto castellanos como asturianos. 
Años más tarde, en 1993 el bar llevo una transformación pasando, sin perder el aire antiguo, a un local preparado para los tiempos modernos. 
Durante los años que regentaron el bar  Felisa y Manolo, fueron muchos a los trataron  como si fuesen su familia, dándoles consejos y atendiéndolos cuando su familia estaba lejos, muchas navidades compartían su mesa con aquellos que no tenían familia o que la tenían muy lejos. En el Ávila tenían buenos embutidos y buen jamón de Ávila.
Mary paso toda su infancia y juventud en nuestro pueblo con sus tíos. Nunca se dejó a nadie sin comer ni cenar, fuese a la hora que fuese, si no había nada preparado se hacía un plato, con lo que hubiese en la despensa, pero nadie salía con hambre del Avila. 
El bar Ávila fue siempre un lugar de encuentro para muchos vecinos de Trasona, era frecuente entrar a tomar una pinta de vino y de paso probar algo de lo preparado por Felisa. En el Ávila se creo una peña de quinielas, no se si les habrá tocado alguna vez, lo que si sabemos es lo bien que se lo pasaban en las cenas y fiestas que celebraban con las familias socias de la peña. Manolo, amenizaba con su guitarra las cenas de los amigos de la peña (...). En el Ávila seguían haciéndose partidas de brisca, tute y lo que pintara, Feli, no tenía problema por ponerse a jugar cuando se necesitaba"

En 1999 fueron distinguidos dentro del homenaje que rindió la Cámara de Comercio de Avilés a las empresas con más historia de los concejos de la comarca, su ámbito de actuación
"Por esos días la Nueva España realizó un reportaje hablando del bar y su historia, en este relato hablaba también Raquel González, hija de Modesto que vivió en el bar hasta los 19 años, y era de las  hermanas que tostaban el café que venía de Cuba.
 Pero todo no fue trabajo, alguna vez esta pareja también acudía de boda, aunque siempre dejándolo todo preparado, Feli, siempre contó con la presencia de su sobrina Mary. 
Con la edad, llego el retiro a esta familia, pasan temporadas en su querida Ávila y temporadas en Trasona. Alquilaron su negocio, primero a Santiago y luego a Cris y Jesús
Luego de su retiro, el Bar Ávila fue alquilado, primero a Santiago, a continuación a Cris y Jesús y, después de un tiempo cerrado, a Noe Diego


Al final de San Pelayo estuvo la tienda de ultramarinos La Salmantina, donde se puso la peluquería de Angelines, que luego fue de Esperanza

"Años después, Gelinos o Geli, "la peluquera" cuñada de Pepe el de Las Jarras y Yuyo, puso en esta misma casa su negocio de peluquería, siempre cariñosa y con la mejor de sus sonrisas para todo el mundo, tenía mucha clientela, unos años después a su marido Manolo, empleado de ENSIDESA, le concedieron una casa en el Pobladín, donde trasladaron el negocio"

Una de sus pupilas, Esperanza Gancedo, que hacía prácticas en esta peluquería, pasó a regentarla cuando Geli se marchó a La Marzaniella

Aquí se estrecha la acera, pues vamos a cruzar el puente sobre el río Alvares, por donde pasaremos al citado barrio de La Marzaniella, el de los poblados mineros de Ensidesa

Volviendo la vista atrás tenemos una preciosa estampa del puente hacia la iglesia, volviendo a ver el Restaurante San Cristóbal y el Bar Ávila, este promocionó grandemente en su época el famoso café de manga, así explicado en el blog Trasona Corvera:

"Antiguamente en Trasona, se hacía el café en pota, era alta y con un asa lateral vertical o sencillamente una pota alta. 

El café que empleaban era recién tostado, cuanto menos tiempo pase desde que se tuesta hasta que se consume es mejor para el sabor, más o menos la receta es así:
Mueles el café en el molinillo de toda la vida, pones el agua a hervir en la famosa pota, cuando empiece la ebullición lo retiramos del fuego y añadimos el café molido, y achicoria para que quede más oscuro, primero la achicoria.
    
La medida del cajetín del molinillo o cuatro o cinco cucharas de café por litro de agua, lo revuelves bien y lo dejas tapado reposar como unos diez minutos, después lo cuelas en una manga de café de tela a una jarra o a un cazo y lo sirves, si lo usas a lo largo del día lo tiene que calentar con cuidado de que no hierva, porque había un dicho que decía café hervido, café perdido. 
En Trasona las hermanas de Ca Modesto que tenían el Bar ahora llamado Avila, tostaban en unas sartenes especiales el café que le enviaban sus hermanos de Cuba y lo usaban para hacer café en el bar o para vender a los vecinos, todo el mundo decía que estaba exquisito y que el olor a café se propagaba por todo San Pelayo"

Pasamos sobre el río Alvares, canalizado, que aquí empieza a formar la Ría de Avilés tras su desembocadura en el Embalse de Trasona, por lo que esta es su continuidad hacia el estuario. En su ribera derecha, bajo las casas de San Pelayo, hay buenas huertas familiares, mientras que en la de la izquierda crece la silva, las enmarañadas zarzas, los escayos. Por ello su limpieza es una constante preocupación, junto con los vertidos. Así lo comprobamos en esta noticia de El Comercio del 20 de febrero de 2017:

"Las márgenes del río Alvares a su paso por Trasona, en concreto por Fafilán, se encuentran llenas de maleza y urgen una limpieza. Así lo consideran algunos vecinos de la zona. Estos trabajos corresponden a la Confederación Hidrográfica, que es quien tiene las competencias sobre los ríos en Asturias. El Alvares recorre gran parte del concejo y llega al pantano de Trasona, desde donde vuelve a su cauce para desembocar en la ría de Avilés. Los vecinos de la zona recuerdan como hace años en la misma zona se podían bañar y tomar el sol en sus orillas, una actividad ahora imposible de practicar por el estado de las márgenes y de los solares anexos al mismo. Otros piden además, que se siga manteniendo limpio el lavadero, que hace años el Ayuntamiento limpió y adecentó"

El Alvares nace en el lugar de este nombre de este mismo concejo de Corvera y constituye uno de los principales afluentes del estuario avilesino, que por aquí recibe también las aguas procedentes del río Tamón o Tabaza, cuyo valle, ocupado por la siderurgia, estuvimos recorriendo

Al fondo se extienden los Talleres Generales de Ensidesa, proyectados por el ingeniero Carlos Fernádez  Casado y que ya en 1953 sus obras se encontraban muy avanzadas, siendo el primero en estar acabado el de calderería, al que siguieron por este orden el de fundición y el mecánico, todos ocupando una gran superficie con inmensas naves

Las pequeñas huertas de San Pelayo reflejan lo que fue antaño la fértil vega de estos valles corveranos...

Pasamos al lado y seguimos de frente en este cruce, en el dejaremos a la izquierda el ramal que comunica con Fafilán y la parte sur de Trasona, subterráneamente por debajo de la autopista. Era llamado popularmente El Túnel del Estratégico, pues había sido hecho en origen para pasar bajo las vías de aquel Ferrocarril Estratégico que nunca llegó a pasar por aquí y cuya obra fue aprovechada después para "La Pista"


Al otro lado, se extiende esa parte de Trasona al sur de esta verdadera frontera interna trasoniega, de Fafilán al Embalse y Los Campos. Ya desde tiempo atrás, algunos vecinos de los barrios de la carretera, se trasladaban a esa parte a vivir, como fue el caso de Margarita de Ca Modesto y Amaro, que tenía camiones y era transportista, sobre todo de material de construcción, que residían antes en San Pelayo


Debajo del puente, cuando apenas había aún coches, era corriente ver los carromatos de las familias gitanas. Los hombres hacían cestos de mimbre al calor de las hogueras, que luego las mujeres vendían por las casas de Trasona


Y ahora, a solamente 4 kilómetros de Avilés, lo que viene a ser una hora andando poco más o menos, vemos las primeras casas de La Marzaniella, el barrio más occidental de Trasona, lindante con Avilés, que nos ofrecerá un paisaje diferente y característico, el de los poblados obreros. Allí podremos optar entre seguir por la carretera o tomar el hermoso ramal que, cruzando el naciente estuario, nos llevará a Avilés por el Paseo de la Ría, el cual palia muy notablemente un aún muy degradado entorno





No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tu visita y contribuir con tu comentario... Únete a la Página Oficial en Facebook para descubrir nuevos contenidos....Ultreia!